Una semana después de que Petróleos Mexicanos sorprendiera a los inversionistas al decir que el gobierno se haría cargo de sus pagos de amortización, los bonos de la compañía de petróleo han revertido todas sus ganancias en tanto que el estado guarda un desconcertante silencio sobre los detalles de dicha propuesta.
Los bonos de Pemex sufren por el plan del gobierno para pagar sus deudas
El miércoles, el bono con vencimiento en 2031 cayó 0.2 centavos por dólar, lo que llevó su caída desde su máximo intradiario del 28 de octubre a más de 2 centavos y arrastró los bonos al nivel en el que estaban cuando el director general, Octavio Romero, hizo el anuncio el 27 de octubre.
Cumplir con los pagos de la deuda de Pemex hasta el final de la presidencia de Andrés Manuel López Obrador en 2024 le costaría al gobierno alrededor de 36,000 millones de dólares. Eso representaría un gran alivio para la petrolera, que cuenta actualmente con una deuda de 115,000 millones de dólares y ha visto disminuir su producción de crudo durante 15 años. Pero el silencio del gobierno ahora ha provocado que los inversionistas frenen su entusiasmo.
“No creo que tengamos suficientes detalles” sobre la propuesta, dijo Jens Nystedt, gerente de cartera de EMSO Asset Management en Nueva York.
En los últimos cuatro días, los diferenciales de rendimiento de los bonos de Pemex frente a los bonos del Tesoro estadounidenses equivalentes se han ampliado casi 24 puntos básicos a 476 en los últimos cuatro días. Los pagarés a 10 años de la compañía han tenido un desempeño inferior al de sus contrapartes soberanas mexicanas durante el mismo período, registrando un rendimiento negativo de 1.4% frente a la pérdida de 0.5% del soberano.