La presencia de la OTAN en Ucrania, nación vecina de Rusia, es considerada un acto de hostilidad para Moscú. Además, el territorio ucraniano formó alguna vez parte de la extinta Unión Soviética, por lo cual Rusia tiene gran influencia geopolítica ahí y la quiere seguir conservando.
Inicio de las sanciones económicas
Las tensiones han escalado hasta el punto de que, al inicio de esta semana, Rusia declaró la independencia de dos regiones prorrusas al este de Ucrania. Inmediatamente, el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó desplegar a su ejército en esta zona para “salvaguardar la paz”.
La acción desató las sanciones económicas, pues se considera, en los hechos, que se está iniciando una invasión a Ucrania.
Alemania decidió bloquear la certificación del gasoducto ruso-alemán Nord Stream 2, vital para el abastecimiento energético de Europa.
Reino Unido impuso sanciones para bancos y millonarios vinculados con el gobierno ruso: Rossiya Bank, IS Bank, General Bank, Promsvyazbank y el Black Sea Bank.
Los empresarios Gennady Timchenko, Boris Rotenberg e Igor Rotenberg, considerados aliados de Putin, tendrán sus activos congelados y se les prohibirá viajar al Reino Unido.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el boqueo de los principales bancos rusos: el VEB, uno de las mayores instituciones de inversión y desarrollo y el banco militar de Rusia.