“Los inversionistas están perdiendo lentamente la paciencia con Musk, especialmente porque su enfoque está lejos de Tesla y directamente en Twitter, mientras trata de justificar el enorme precio de 44,000 millones de dólares que pagó por la empresa. Los próximos meses serán una gran prueba para que Tesla navegue por la débil confianza de los inversionistas, los problemas actuales en China, los signos de interrogación en la demanda y el deterioro de la reputación de la marca”, indicó Josh Gilbert, analista de mercado de eToro.
Expectativas para 2023
Se espera que este año el reciente anuncio de reducción de precios en sus autos pueda impulsar la demanda para este año, esto como un intento de recuperarse tras los decepcionantes reportes trimestrales de 2022, los cuales no cumplieron con la meta de ventas los cuales quedaron lejos no solo de sus propios objetivos, sino también de las previsiones menos optimistas de los analistas.
El plan gustó a los inversionistas, pues este martes la acción de Tesla cerró en un precio de 131.49 dólares con un incremento de 7.4%, el mayor variación en casi dos semanas. La perspectiva para los próximos 12 meses es que la acción pueda llegar a un precio de 194.25 dólares, es decir, un potencial de retorno de 47.7%.
John Murphy, analista de Bank of America señaló que aunque es poco probable que disminuyan los vientos en contra relacionados con la demanda y el aumento de la competencia de los vehículos eléctricos, el autofinanciamiento de Tesla y al acceso a capital a bajo costo pueden respaldar su futuro crecimiento.