La encuesta, aplicada a más de 2,600 clientes, se realizó de octubre a noviembre, justo cuando el mercado de valores tocó fondo. Desde su mínimo del 12 de octubre, el índice S&P 500 ha subido cerca de un 16%.
A pesar del repunte de las acciones, el efectivo está cada vez más de moda. Vehículos como las cuentas de ahorro de alto rendimiento, los fondos del mercado monetario y los certificados de depósito ofrecen retornos atractivos por primera vez en años en medio de la agresiva campaña de aumento de tasas de la Reserva Federal.
La popular cuenta Marcus de alto rendimiento de Goldman aumentó recientemente su tipo de interés al 3.9%.
Aun así, hay mucho debate sobre si esos productos pueden en realidad competir contra la inflación y el mercado bursátil. También hay inconvenientes en sacar dinero de acciones, por ejemplo, datos de JPMorgan Asset Management muestran que los inversionistas que estuvieron ausentes en los 10 mejores días del S&P 500 en las dos décadas hasta 2022 recibieron la mitad de ganancias de los que estuvieron en el mercado durante todo el período.
Los baby boomers son más propensos que los millennials a trabajar en estrecha colaboración con un asesor financiero, lo que pudo haberlos alentado a seguir invirtiendo durante la volatilidad del mercado, dijo Mike Lee, líder de EY Global Wealth & Asset Management. También pueden tener un estómago más fuerte para sortear las oscilaciones del mercado después de haber observado recuperaciones anteriores del mercado, incluido el repunte tras la crisis financiera de 2008, indicó.
EY Global Wealth & Asset Management descubrió que más clientes pueden acudir en masa al efectivo. “Si continúa la volatilidad, una mayor proporción de clientes (43%) aumentaría aún más su exposición a los ahorros y depósitos”, dijo el informe.
La encuesta utilizó las siguientes definiciones de edad: Millennials (21-41), Gen X (42-57) y Baby Boomers (58 y más).