Once ETF de bitcoin al contado, incluidos iShares Bitcoin Trust IBIT.O, Grayscale Bitcoin Trust GBTC.P, Valkyrie Bitcoin Fund BRRR.O y ARK 21Shares Bitcoin ETF ARKB.Z, entre otros, comenzaron a cotizar el jueves por la mañana, dando inicio a una feroz competencia por la cuota de mercado.
"La aprobación tiene el potencial de simplificar y asegurar las inversiones en bitcoin para una base de inversores más amplia, lo que puede remodelar la dinámica de las inversiones en criptodivisas", dijo Rajeev Bamra, vicepresidente senior de finanzas digitales de Moody's Investors Service.
El lanzamiento del ETF llevó el precio del bitcpin BTC= a su nivel más alto desde diciembre de 2021. La criptomoneda subía un 0.16%, a 46,021 dólares, mientras que el precio del éter ETH=, la segunda mayor criptodivisa, avanzaba un 2.42%.
Carrera por la cuota del mercado
Se espera que el visto bueno normativo inicie una intensa competencia por la cuota de mercado entre los emisores, algunos de los cuales bajaron las comisiones de sus productos a menos de lo que es usual en el sector estadounidense de ETF, incluso antes del lanzamiento del jueves.
Las comisiones de los nuevos ETF de bitcoin oscilan entre el 0.2% y el 1.5%, y muchas empresas ofrecen renunciar por completo a ellas durante un tiempo. Para los especuladores a corto plazo que quieran entrar y salir de los productos, la liquidez podría ser un factor más importante.
El jueves, Grayscale, que obtuvo la aprobación para convertir su fondo fiduciario de bitcoines en un ETF, promocionaba su producto como el mayor ETF de bitcoins del mundo, con más de 28,000 millones de dólares (mdd) en activos gestionados.
Los analistas de Bernstein estiman que los flujos de entrada a los ETF de bitcoin aumentarán gradualmente hasta superar los 10,000 mdd en 2024 en su carrera hacia los 80,000 mdd a finales del próximo año. Otros analistas han dicho que los flujos de entrada podrían ser de 55,000 mdd en cinco años.
Algunos analistas advirtieron que la euforia en torno a la aprobación podría ser prematura. La comunidad inversora en general sigue considerando arriesgadas las criptodivisas, y escándalos como la implosión de la criptobolsa FTX en 2022 aumentan la desconfianza de los inversores.