Los precios del café están alcanzando niveles récord, en la medida que no existe oferta suficiente de cara a 2025. Y el aumento de los costos pone en alerta a mayoristas y minoristas alrededor del mundo.
¿Un 2025 descafeinado? Los precios del café tocan máximos históricos
Los futuros del café (arábiga) tocaron un máximo de 3.4735 dólares por libra la semana pasada debido a las preocupaciones por el impacto de una grave sequía. Brasil, principal productor mundial, es uno de los países más afectados.
Los pronósticos de una menor producción llegaron después de que los precios del café de variedad arábiga (de más alta calidad) ya habían comenzado a subir, al incrementarse su demanda debido a la escasez de la variedad robusta, más barata y usada principalmente para fabricar café soluble.
A pesar de que el costo por libra, en el mercado de materias primas, es de 3.29 dólares al cierre de este miércoles, en los mercados minoristas el precio podría ser mucho más alto, pues se deben agregar costos como transporte, tueste y otros costos asociados al consumo final.
La última vez que el café cotizó tan alto fue en 1977, cuando la nieve destruyó gran parte de las plantaciones brasileñas. Sin embargo, entonces el impacto para los consumidores fue mucho mayor. Si se ajusta a la inflación, 3.36 dólares por libra en 1977 equivaldrían a 17.68 dólares en la actualidad.
Un año más de escasez en 2025
El café arábigo representa cerca del 70% del mercado mundial, de acuerdo con la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos.
Brasil, que produce casi la mitad de la producción mundial de arábica -granos de alta calidad utilizados principalmente en mezclas tostadas y molidas- ha sufrido este año una de las peores sequías de las que se tenga registro.
Aunque las lluvias llegaron por fin en octubre, la humedad del suelo sigue siendo baja y los expertos afirman que los árboles producen demasiadas hojas y muy pocas de las flores que se convierten en granos.
En Vietnam, que produce alrededor del 40% de los granos de robusta que suelen utilizarse para hacer café instantáneo, a una grave sequía a principios de año siguió un exceso de lluvias desde octubre.
Los tostadores suelen comprar el café con muchos meses de antelación, lo que significa que es probable que los consumidores perciban la subida de precios en un plazo de seis a 12 meses.
Con información de Reuters