El gasto público para el desarrollo de infraestructura el próximo año será insuficiente para atraer las inversiones por nearshoring e impulsar el crecimiento de la economía, a los niveles que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) proyecta en el Paquete Económico, de acuerdo con especialistas.
De acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2025, aprobado por el Congreso de la Unión la semana pasada, el monto de la inversión física llegará a 847,300 millones de pesos, lo que representará el 2.3% del PIB, el monto más bajo desde 2019, cuando llegó a 2.2%, y un porcentaje menor al 2.7% que se prevé para el cierre de este 2024, indica un análisis de México Evalúa.
Frente a 2024, y con reajustes hechos en la Cámara de Diputados a la propuesta del PEF 2025, representa un recorte de 11.6%, equivalente a 111,283 millones de pesos, y el cual se focaliza en la infraestructura de combustibles, carretera e hídrica. Lo cual, de acuerdo con analistas de México Evalúa, “podría limitar la creación de ingresos futuros, el desarrollo económico de México, así como la atracción de inversiones por nearshoring.”