En los comerciales de Coca-Cola hay un paradigma que, a lo largo de los años, no cambia: el mensaje de amor, hermandad y unidad. En 1971, mientras se desarrollaba la guerra en Vietnam, la empresa lanzó en televisión el anuncio que es considerado como el más emblemático de la compañía: I’d like to buy the World a Coke.
En el comercial, un grupo de personas de diferentes etnias y representaciones, cada una con una Coca-Cola en la mano, entonan la canción I'd like to teach the world to sing, que en una estrofa hace referencia a la paz en la tierra. Y para Claudia Navarro, este mensaje es la columna vertebral de la comunicación de la refresquera.
Este mensaje no caduca. La vicepresidenta de marketing de la empresa para Latinoamérica considera que refleja los valores de la compañía y se aplica de manera consistente a través del mundo, y que conecta con diferentes grupos de personas, incluso con diferentes generaciones, además de dar un paso natural hacia la inclusión, que es otra bandera que la empresa también abraza.