Carlos Slim es percibido como un empresario que ha forjado su camino "desde abajo". Junto a su familia, estableció la firma de inversión Inversora Bursátil apenas cuatro años después de graduarse como ingeniero civil de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Hoy día, es dueño de empresas como Grupo Carso, Telmex, Telcel, América Móvil, Grupo Financiero Inbursa, Sanborns, Condumex y es el primer accionista individual del Grupo The New York Times.
Tres especialistas consultados identificaron una serie de atributos que podrían agruparse en tres características principales que distinguen la marca personal de Carlos Slim.
Una trayectoria coherente
Tomás Rosales, académico de la UNAM, añade que el éxito que ha tenido el empresario y su consecuente posicionamiento positivo obedece a que que "no se distrae con modas empresariales".
En ello coincide Martha Aida Cantú, consultora asociada de Grupo Imagen Pública y socio fundadora de MAC Consultores en Imagen Pública, quien destaca que una de las claves en la construcción de una marca personal del magnate es la coherencia que ha mantenido a lo largo de los años en su imagen, en lo que comunica, en sus acciones y su actitud.
"Su perfil sobrio y empresarial, enfocado en la eficiencia y la competitividad, ha sido una constante en su trayectoria. Esta coherencia en su imagen tiene un impacto positivo, ya que todos los estímulos que emanan de él son recibidos de manera consistente por su público objetivo y entorno. Esta uniformidad en su enfoque contribuye a que no haya elementos discordantes que puedan generar percepciones negativas”, explica.
Un líder auténtico y humilde
Para Nora Taboada, especialista en liderazgo, otro de los rasgos de la marca personal de Slim es su autenticidad. "Un líder como Carlos Slim conecta genuinamente con otros, da la sensación de que cumple sus promesas y mantiene la integridad. Esto contribuye a su reputación y establece una base ética y confiable en el ámbito empresarial", señala.
Cantú agrega que el empresario mexicano ha cultivado una imagen de cercanía y humildad, destacándose especialmente en contraste con otros magnates exitosos como Ricardo Salinas Pliego, quien exhibe abiertamente su estilo de vida lujoso en las redes sociales y responde de manera directa a los comentarios negativos que recibe.
“Slim no se engancha, defiende la idea de que las cosas no deben regalarse, sino que deben ganarse con trabajo y dedicación, pero ha mantenido un perfil más discreto”, dice Cantú.
Un filántropo
La filantropía es otro aspecto que ha abonado a la construcción de la marca personal de Carlos Slim. En 1986 creó una fundación del mismo nombre, a través de la cual proporciona cursos y talleres gratuitos, así como programas destinados a la restauración del entorno ambiental. Sin embargo, a diferencia de otros empresarios con fundaciones similares, el propietario de América Móvil no hace alarde de sus contribuciones, señala Cantú. "Él se aferra a la idea de 'Yo logré esto, ahora es mi turno de apoyar para que otros también lo logren'", agrega.
La familia Slim ha sido un actor clave en el ascenso de figuras prominentes, como el piloto de Fórmula 1, Sergio 'Checo' Pérez, quien obtuvo reconocimiento como parte de la Escudería Telmex, un programa que trabaja en conjunto con la Fundación Carlos Slim y que busca abrir nuevas oportunidades para que los jóvenes pilotos puedan acceder a las categorías con mayor prestigio.
“Slim desafía el estigma de que los ingenieros son centrados y rígidos. Creo que, al contrario, ha sabido mostrarse humano, y por eso la gente lo percibe como alguien cercano”, concluye la especialista en imagen pública.