Un campo de batalla global para las marcas
El Mundial 2026 no será cualquier torneo. Por primera vez, el evento contará con la participación de 48 selecciones, lo que lo convierte en la edición más grande de la historia y, además, será organizado por tres países: Canadá, Estados Unidos y México.
Esto representa un escenario único para Sabritas, no solo por su arraigo local en México, sino por la posibilidad de extender su alcance a otros mercados. Con este patrocinio, la marca planea aprovechar la visibilidad en pantallas LED, en las conferencias de prensa y, más allá del terreno de juego, en experiencias inmersivas que formarán parte de las fan zones oficiales de la FIFA.
“Lay’s tiene una larga historia de unir a los fanáticos a través del amor compartido por el juego, y esperamos crear aún más momentos icónicos mientras continuamos utilizando nuestras marcas para inspirar a los fanáticos”, dijo en un comunicado Steven Williams, CEO de Lay's y Quaker para América del Norte.
Aquí es donde las marcas como Sabritas logran una sinergia con el evento deportivo, capitalizando la pasión que despierta el fútbol en los consumidores y asociándose con los valores de unión, celebración y disfrute que promueve el Mundial.
La anticipación comienza mucho antes del silbatazo inicial
Aunque faltan aún dos años para el arranque del Mundial 2026, Sabritas ya está preparando el terreno. Desde promociones en tiendas físicas y digitales hasta la premiación de fanáticos con la iniciativa “Fanático del Partido”, la marca busca estar presente en cada rincón donde haya pasión por el fútbol. Este tipo de acciones no son solo estrategias de marketing, sino una manera de asegurar que la marca se posicione en la mente del consumidor mucho antes de que el balón comience a rodar.
Por otro lado, el hecho de que Sabritas extienda su patrocinio hasta la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2027 no es casualidad. El crecimiento del fútbol femenino a nivel global representa otra oportunidad clave para captar audiencias diversas y fortalecer el posicionamiento de la marca entre diferentes grupos demográficos.
El éxito de una estrategia de patrocinio no se mide únicamente por el logotipo en las pantallas o las promociones directas. Sabritas también está invirtiendo en proyectos de impacto social, como su programa Sabritas RePlay en México, que crea canchas de fútbol sostenibles a partir de bolsas de papas reutilizadas. Este enfoque comunitario refuerza la idea de que, para las marcas, ser parte del Mundial no se trata solo de vender más productos, sino de ganar visibilidad. El desafío será encontrar formas auténticas de conectarse con los aficionados y no solo ser parte del paisaje comercial del evento.