Otro foco
Un conductor de autobús que realiza el transporte en el aeropuerto de aviación civil de Pekín es uno de los nuevos casos confirmados, indicaron hoy las autoridades sanitarias municipales.
El hombre, de 56 años, vive en el distrito de Xicheng, donde se detectó el primer caso el pasado jueves, y visitó el mercado de Xinfadi el 3 de junio.
Se sintió mal dos días después y el pasado viernes fue diagnosticado como confirmado en el hospital de Xuanwu.
Según el diario Beijing News, el conductor llevaba meses sin ir al trabajo por lo que no ha tenido contacto con ningún viajero.
El hospital de Guangwai en el distrito de Xicheng anunció hoy que ha entrado en "modo de emergencia de tiempos de guerra" y ha solicitado a todo su personal médico que permanezca en su puesto sin tomarse tiempo de descanso ante cualquier eventualidad.
La ciudad de Shulan, en el noreste de China, que vivió otro rebrote recientemente y aisló a cerca de 8,000 personas, ha aconsejado a sus residentes que no viajen a la capital y ordenado a los que regresen de ella que informen al llegar a sus comunidades de vecinos.
Otra ciudades cercanas a Pekín, como varias de la vecina provincia de Hebei, enviaron hoy 300 toneladas de vegetales frescos a la capital para contribuir a paliar el efecto del cierre del mercado de Xinfadi, que suministraba el 90% de estos productos a la ciudad.
En cualquier caso, según la televisión estatal, los supermercados de Pekín han incrementado su suministro de vegetales con otras fuentes y disponen actualmente de tres veces la cantidad media habitual diaria.
El epidemiólogo jefe del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de China, Zeng Guang, aseguró hoy que "afortunadamente Pekín encontró el brote temprano y se ha movido rápido".
Zeng afirmó que los resultados preliminares de la secuencia genética del virus que se ha encontrado en Xinfadi indican que "no se parece al tipo que ha circulado mayormente en China los últimos meses".
Sin embargo, precisó que se han analizado dos muestras y que son necesarias más para determinar las características del virus con exactitud.
"La prueba por la que está pasando Pekín es la mayor tras el periodo de calma que ha experimentado todo el país", destacó.
El virus fue detectado en una tabla de cortar pescado empleada por un vendedor de salmón importado en Xinfadi.
China importa cerca de 80,000 toneladas de salmón congelado cada año, principalmente de Chile, Noruega, las Islas Feroe, Australia y Canadá, según los medios locales.