Hace hincapié en particular, en "cesar las inversiones en la exploración y extracción de energías fósiles, eliminar todos los subsidios a estos combustibles y a abandonarlos por completo inmediatamente".
Además, pide obrar para hacer del "ecocidio" un delito por parte de la Corte Internacional de Justicia de la ONU en La Haya.
Para los autores del texto, la pandemia de COVID-19 y la movilización que ha provocado en todo el mundo demuestran "que la crisis climática jamás ha sido tratada como tal, ni por parte de los políticos, los medios de comunicación, o el mundo de los negocios y las finanzas".
Entre los firmantes hay en científicos de renombre dedicados al clima, como Hans Joachim Schnellnhuber, y los profesores Kevin Anderson y Michael Mann, así como la organización Greenpeace.
Bas Eickhout, un europarlamentario verde holandés, dijo a Reuters que se necesitan criterios claros para garantizar que son usados para librar al continente de carbón, petróleo y gas natural, señalando que habría sido un buen comienzo un compromiso de "no destinar dinero a combustibles fósiles. El hecho de que no lo hicieran dice mucho".
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, brazo ejecutivo del bloque, intentó aliviar estas preocupaciones diciendo a Reuters que "los estados miembro deberán cumplir hitos antes de que haya un desembolso de dinero".
"Los objetivos generales a nivel europeo deben ser visibles en los planes de recuperación nacionales", indicó, agregando que las grandes sumas en juego dan a la UE "una gran ventaja" para garantizar que los planes de los países son verdes.
Algunas voces ecologistas temen que se destinen fondos a proyectos con gas natural. Aunque se considera una fuente más limpia de generación eléctrica que el carbón, los científicos destacan que sigue siendo un combustible fósil y puede generar emisiones de dióxido de carbono y metano que calientan el planeta durante décadas.
El paquete será analizado por el Parlamento Europeo desde este jueves y los eurodiputados están recibiendo llamados para que introduzcan controles más estrictos antes de su aprobación.
"Ahora depende del Parlamento aumentar la ambición sobre el gasto climático", dijo Manon Dufour, del centro de estudios climáticos E3G. "Hay mucho margen disponible aún".
Con información de Reuters y AFP