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Senado de EU inicia el proceso para confirmar a Amy Barrett a la Corte Suprema

La jueza deberá enfrentar esta semana la oposición demócrata, que considera que el nombramiento de este puesto vitalicio debe realizarse después de las elecciones.
lun 12 octubre 2020 12:33 PM
Audiencias
El coronavirus puede ser el único obstaculo entre Amy Coney Barrett y la Corte Suprema.

El Senado de Estados Unidos comenzó este lunes el proceso de confirmación de la jueza Amy Coney Barrett, la jueza conservadora nominada por el presidente, Donald Trump, para la Corte Suprema, a pocos días de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.

La magistrada conservadora de 48 años fue seleccionada el 26 de septiembre por el presidente republicano para suceder al ícono feminista y progresista Ruth Bader Ginsburg, falledida ocho días antes de cáncer.

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Los demócratas se oponen firmemente a Barrett, cuya confirmación le daría a la corte una mayoría conservadora de 6-3 que podría llevar a fallos que revoquen los derechos al aborto, amplíen los derechos religiosos y de armas y mantengan las restricciones al voto respaldadas por los republicanos, entre otras cuestiones.

Conforme la Constitución, ella debe obtener el aval del Senado para entrar al templo del derecho estadounidense, donde ya cinco de los nueve miembros son jueces conservadores.

Los demócratas y su candidato a la presidencia, Joe Biden, reclaman esperar el veredicto de las urnas antes de buscar llenar ese puesto, designado de por vida y extremadamente influyente, pero Trump quiere avanzar lo más rápidamente posible para satisfacer a los electores de la derecha religiosa.

La audiencia de Barret comenzó con senadores haciendo declaraciones de apertura. La propia Barrett hará su propia declaración de apertura después de que los 22 miembros del comité tengan la oportunidad de hablar, y se enfrentará al interrogatorio de los senadores el martes y miércoles.

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"Esta será una semana larga y polémica", dijo el senador republicano Lindsey Graham, quien preside el comité, y agregó: "Hagámoslo respetuoso. Hagámoslo desafiante. Recordemos que el mundo está mirando".

Graham dejó clara la intención de su bancada: "Ayudar al presidente Trump", quien está detrás de Biden en las encuestas a tres semanas de las elecciones.

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"Si quieren pelea por Amy Barrett, la tendrán", dijo a Fox en referencia a los demócratas mientras la jueza se dirigía al Congreso con su familia.

Barrett se sentó en una mesa frente a los senadores con una mascarilla negra en medio de la pandemia de coronavirus. Su esposo y siete hijos se sentaron detrás de ella, también con máscaras protectoras. Los republicanos tienen una mayoría de 53-47 en el Senado, por lo que la confirmación de Barrett parece casi segura, como reconoció Graham.

"Probablemente no se trate de persuadirse unos a otros, a menos que suceda algo realmente dramático. Todos los republicanos votarán sí y todos los demócratas votarán no", dijo Graham.

Graham reconoció que los republicanos del Senado se negaron hace cuatro años a actuar sobre el candidato del presidente demócrata Barack Obama para cubrir una vacante en la Corte Suprema durante un año electoral, y que ningún candidato a la Corte Suprema ha tenido un proceso de confirmación tan cercano a una elección.

"Siento que estamos haciendo esto constitucionalmente", dijo Graham.

La senadora Dianne Feinstein, la demócrata principal del comité, se centró en un próximo caso de la Corte Suprema en el que Trump y otros republicanos instan a los jueces a derogar la ley de atención médica de Obamacare, conocida formalmente como Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA).

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Feinstein señaló que Barrett había criticado el fallo de la corte de 2012, escrito por el presidente del Tribunal Supremo conservador John Roberts, que confirmó la ley. Barrett podría estar en la cancha para cuando se discuta el caso el 10 de noviembre.

"Esto bien podría significar que si se confirma al juez Barrett, los estadounidenses pueden perder los beneficios que brinda la ACA", dijo Feinstein.

Barrett está bien vista en los círculos cristianos tradicionales, con los que comparte valores, empezando por una oposición declarada al aborto y una adhesión al concepto de pareja como la unión "de un hombre y una mujer", según una carta enviada al papa en 2015.

Católica practicante, madre de siete hijos, incluidos dos adoptados de Haití y un pequeño con síndrome de Down, en algún momento declaró tener por "causa" servir al "reino de Dios".

Su pertenencia a un pequeño grupos de católicos, People of Praise, que siguen ritos alejados del canon oficial, es objeto de atención especial en los últimos días.

Pero la magistrada, con una reputación de hacer argumentos jurídicos minuciosamente trabajados, afirma que sabe distinguir sus convicciones personales de su labor como jueza.

Ante los senadores, debería subrayar que se esfuerza siempre por hacer "todo lo posible para llegar al resultado requerido por la ley, cualesquiera que sean mis preferencias personales".

"Las cortes no están hechas para resolver cada problema o corregir cada error en nuestra vida pública. Las decisiones de política pública (...) deben tomarse por las ramas políticas que son elegidas y rinden cuentas al pueblo", debería decir en su presentación, publicada por varios medios.

Además del desempeño de Barrett en la audiencia, los observadores también estarán atentos a una integrante en particular de la comisión judicial, encargada del interrogatorio: la senadora Kamala Harris, compañera de fórmula de Biden.

Lee

Un debate diferente

Un debate diferente

Los candidatos a la vicepresidencia de Estados Unidos, la demócrata Kamala Harris y el republicano Mike Pence, debatieron este miércoles en la Universidad de Utah, en Salt Lake City.
FOTO: Reuters/Brian Snyder
Separación

Separación

Para prevenir el contagio de COVID-19, los candidatos debatieron a una distancia de 12 pies y separados por una mampara.
FOTO: AFP/Morry Gash
En defensa de Trump

En defensa de Trump

El vicepresidente Mike Pence se dedicó a defender el trabajo de Donald Trump durante sus casi cuatro años de gobierno.
FOTO: AFP/Eric Baradat
Evaluar al gobierno

Evaluar al gobierno

Kamala Harris, en cambio, criticó las acciones de gobierno de Donald Trump, espemte su respuesta a la crisis de COVID-19 en Estados Unidos.
FOTO: Reuters/Brian Snyder
Complicaciones

Complicaciones

Pence es el jefe del grupo de respuesta a la pandemia de COVID-19, por lo que muchas de las críticas de Harris fueron hacia su gestión.
ROBYN BECK/AFP
Poca transparencia

Poca transparencia

Una de las principales criticas de Kamala Harris fue la poca información que el gobierno de Donald Trump proporcionó sobre el avance de la pandemia.
FOTO: Reuters/Brian Snyder
Un debate armónico

Un debate armónico

El debate contrastó con el primer encuentro entre Donald Trump y Joe Biden por su armonia y el respeto entre ambos candidatos.
POOL/via REUTERS
La otra protagonista

La otra protagonista

Uno de los momentos más comentados en redes sociales fue cuando una mosca se posó sobre el vicepresidente Mike Pence.
FOTO: Reuters/Mike Blake
Histórico

Histórico

Kamala Harris es la primera mujer negra y de ascendencia india que es candidata a la vicepresidencia.
FOTO: Reuters/Brian Snyder
No me sermonee

No me sermonee

Uno de los momentos más tensos del debate vino cuando el vicepresidente dijo que decir que había racismo sistemático era un "insulto" para la policia, a lo que la senadora y ex fiscal exigió: "No me sermonee".
FOTO: Reuters/Brian Snyder
No voy a pedir disculpas

No voy a pedir disculpas

El vicepresidente Mike Pence fue muy claro sobre su posición contra el aborto "Estoy a favor de la vida y no voy a pedir perdón por eso".
FOTO: Reuters/Lucy Nichols
Un momento único

Un momento único

La enfermedad del presidente Trump, así como su edad y la de Joe Biden elevaron la importancia del debate vicepresidencial. En caso de muerte o incapacidad, el vicepresidente ocupa el cargo.
ALEX WONG/AFP
En campaña

En campaña

La senadora Kamala Harri fue acompañada por su esposo Doug Emhoff, mientras que el vicepresidente Mike Pence estuvo con su esposa y segunda dama de los Estados Unidos Karen Pence.
FOTO: Reuters/Brian Snyder

Los defensores de la magistrada consideran que es víctima de hostilidad por su devoción.

"Los ataques permanentes de los demócratas en el Senado y los medios sobre la fe de la jueza Barrett son una vergüenza", dijo el líder de la mayoría republicana en la Cámara Alta, Mitch McConnell.

"Esperamos que reciba una audiencia justa y que no veamos el tipo de ataques contra su fe cristiana", apuntó el vicepresidente, Mike Pence, durante su debate con Harris.

En un país donde solo un cuarto de la población se declara atea o sin religión, la senadora demócrata tuvo cuidado de evitar el escollo.

"Joe Biden y yo somos personas de fe y es insultante que se sugiera que podríamos atacar a alguien por su fe", respondió Harris.

Sin referirse a la magistrada, Harris repitió que era imposible confirmarla luego que "cuatro millones de estadounidenses ya votaron" anticipadamente.

E insistió sobre el hecho de que una Corte Suprema modificada podría anular la emblemática ley de salud del ex presidente Barack Obama, que expandió la cobertura de los seguros médicos a millones de personas.

Sin opciones

A pesar de su oposición a la confirmación de la jueza "ACB", los demócratas tienen pocos medios para bloquear el proceso.

McConnell controla el calendario y los procedimientos del Senado, y los republicanos tienen una mayoría de 53 escaños de 100 en la Cámara Alta.

Aunque dos de ellos —Lisa Murkowski y Susan Collins— dijeron que no votarían por Barrett antes del 3 de noviembre, los republicanos tienen suficientes votos para dar el visto bueno a la magistrada.

Solo el COVID-19 podría perjudiciar el calendario: tres senadores republicanos, Mike Lee, Thom Tillis y Ron Johnson, dieron positivo al virus y están en aislamiento desde hace unos días días.

Los dos primeros, que se sientan en la comisión judicial, podrán participar por videoconferencia en el interrogatorio a Barrett. Pero los tres deberán estar presentes físicamente para el voto en la sesión plenaria, lo que podría representar un potencial problema de seguridad sanitaria.

Prueba de su determinación para lograr esta victoria antes de las elecciones, Johnson se dijo dispuesto a ir al Senado "en traje de astronauta" si fuese necesario.

Con información de AFP y Reuters

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