Destacó no sólo las tasas de incidencia en Estados Unidos y Brasil, sino también en Argentina, Colombia, Perú y México.
"La región todavía está lidiando con un brote significativo", dijo.
Estados Unidos, el país más golpeado del mundo por el virus, sigue teniendo un aumento constante de los casos, en particular en las regiones del Medio Oeste y las Montañas Rocosas. Canadá atraviesa una segunda ola, sobre todo en el noreste en la provincia de New Brunswick.
En América Central, hay un incremento persistente en Costa Rica y Belice, mientras en el Caribe anglófono la mayoría de los casos nuevos se relacionan con viajes internacionales no esenciales.
"Estos resurgimientos subrayan que el combate de esta pandemia no es un esfuerzo de una sola vez, requiere una respuesta continúa", apuntó Etienne.
"La pandemia no ha terminado -puntualizó- y la amenaza de nuevos casos sigue activa en todas partes, por eso los países deben seguir controlando el virus, mientras esperamos la llegada de una vacuna segura y eficaz".
En términos de fallecidos, luego de un pico en julio y agosto, la tendencia es a la baja desde finales de agosto a nivel regional, dijo a la AFP Sylvain Aldighieri, gerente de incidente para covid-19 de la OPS.
Sin embargo, en algunos países, como Argentina, el número de muertos ha aumentado en septiembre, añadió.
Consultado sobre si este incremento de los casos en la región puede reflejarse a futuro en un incremento de las muertes, Aldighieri contestó: "Lastimosamente, sí".
El experto explicó que pueden pasar entre 10 y 20 días para que esto ocurra. Los pacientes críticos, que son menos del 5% de los casos, puede estar en cuidados intensivos hasta tres semanas antes de morir, dijo.
Con información de AFP y EFE