"En cuanto al cambio de liderazgo en Estados Unidos y si será más difícil para nosotros, no lo creo. Será más de lo mismo", explicó el presidente Vladimir Putin en un encuentro con legisladores y responsables públicos.
"No esperamos nada bueno" del futuro presidente, había afirmado previamente el viceministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Riabkov, a la agencia de prensa rusa Interfax.
"Sería extraño esperar algo bueno de gente que, en muchos casos, hizo carrera con la rusofobia, derramando hiel sobre mi país", prosiguió el diplomático, uno de los responsables rusos de las relaciones con las Américas y de la no proliferación de armamento.
Washington ha adoptado varias series de sanciones contra Rusia, sobre todo a raíz del pirateo informático y de las acusaciones de injerencia en las elecciones presidenciales de 2016.
Según el bando demócrata de Biden, Moscú hizo todo lo posible para que en aquel momento ganara Trump. Una investigación de un fiscal especial, que duró dos años, acabó sin pruebas concluyentes.
El gobierno de Trump, y su bancada republicana en el Congreso, insisten en que la amenaza estratégica y comercial que presenta China es mucho más importante.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, comentó este miércoles que las recientes medidas estadounidenses contra empresas rusas y chinas reflejan "la política hostil de Estados Unidos", y prometió "una respuesta".
Con información de AFP y EFE