El Serum Institute de India (SII), el mayor productor mundial de vacunas, ya ha fabricado unos 50 millones de dosis. Chile también está interesado.
El portavoz de la Organización Mundial de la Salud, Tarik Jasarevic, dijo que la última vacuna era importante por sus "atributos de entrega, la escala potencial y la asequibilidad".
Helen Fletcher, profesora de inmunología de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, saludó el "punto de inflexión" en la pandemia.
"Con más de 30 acuerdos de suministro y redes de asociados establecidas a nivel mundial, la vacuna Oxford/AstraZeneca podría frenar la pandemia y debería salvar muchas vidas en el próximo año", señaló.
La pandemia ya ha matado a 1,7 millones de personas en todo el mundo, sembrando el caos en la economía mundial y alterando la vida normal de miles de millones de personas desde que comenzó en la ciudad china de Wuhan hace un año.
Reino Unido y Sudáfrica en particular están lidiando con nuevas variantes del coronavirus, que según el Gobierno británico y los científicos son más contagiosas. Muchos países han respondido prohibiendo los vuelos de pasajeros y bloqueando el comercio.
El presidente ejecutivo de AstraZeneca, Pascal Soriot, dijo a la radio de la BBC que Reino Unido debería ser capaz de vacunar a decenas de millones de personas para finales del primer trimestre.
El regulador de la UE sostiene que aún no ha recibido datos completos sobre la vacuna de AstraZeneca y es poco probable que pueda aprobarla el mes que viene, pero el máximo responsable alemán de inmunización dijo que una revisión continua de los datos significaba que una decisión rápida debería ser posible.
Canadá dijo que necesita más información del fabricante de drogas británico como parte de su examen en curso.
El presidente de las vacunas para el COVID-19 del Reino Unido, Wei Shen Lim, dijo que una sola dosis de la vacuna de AstraZeneca/Oxford tuvo una eficacia de alrededor del 70% desde los 21 días hasta que se administró una segunda dosis a las 12 semanas.
La MHRA aclaró una duda planteada por los datos de Oxford, diciendo que una tasa de éxito del 90% para una media dosis seguida de una dosis completa no había resistido el análisis.
Una investigación de Reuters detalló cómo el régimen de dosificación aparentemente más efectivo era el resultado de un error de cálculo.
Sin embargo, Munir Pirmohamed, presidente de un grupo de trabajo del gobierno sobre las vacunas para el COVID-19 y que participó en la aprobación, dijo que cuando se dieron dos dosis completas con tres meses de diferencia, "la eficacia fue alta, hasta el 80% (...) que es la razón de nuestra recomendación".