Además, se exigirá una cuarentena previa de 21 días tras llegar a Beijing a aquellos que no estén vacunados.
"La Villa Olímpica es un espacio pensado para reducir al máximo el riesgo de contagio, toda la población estará vacunada y la mayoría con dosis de refuerzo, se someterán a pruebas PCR cada día y se seguirán respetando las medidas de seguridad sanitaria ya conocidas", añadió.
Ducrey hizo, no obstante, un llamamiento a equipos y organizadores para que extremen la precaución en estos días previos al inicio de la cita olímpica, ya que todos aquellos deportistas que contraigan la enfermedad no podrán participar en las competiciones hasta que no presenten dos pruebas PCR negativas con una diferencia de 24 horas.
“Todas las pruebas serán revisadas por un equipo médico compuesto por profesionales chinos y extranjeros”, apuntó Ducrey.
Además, tal y como confirmaron desde el COI, aquellos deportistas que se encuentren confinados tras dar positivo en los test pero que no presenten síntomas contarán con algunas facilidades, como acceder a gimnasios o pistas de entrenamiento privadas.
Por último, el directivo del COI aclaró que no se impondrá cuarentena a los contactos cercanos a un positivo dentro de la Villa Olímpica, pero señaló que serán sometidos a dos pruebas PCR diarias durante siete días.
El sistema de burbujas se pondrá oficialmente en marcha el 23 de enero de 2022 (los Juegos se celebrarán del 4 al 20 de febrero) y terminará al final de los Paralímpicos de Invierno (del 4 al 13 de marzo), aunque ya hay personal trabajando dentro de la burbuja desde el pasado 4 de enero.
Con información de AFP, EFE y Reuters