"Una vez más sólo puedo expresar a todas las víctimas de abusos sexuales mi profunda vergüenza, mi gran dolor y mi sincera petición de perdón", afirma el papa emérito en la esperada carta de respuesta al informe sobre los abusos sexuales a menores en Alemania, en el que se afirmaba que estuvo al corriente de cuatro casos de curas pederastas cuando era arzobispo de Múnich.
"He tenido una gran responsabilidad en la Iglesia católica. Como grande es mi dolor por los abusos y errores que han ocurrido durante el tiempo de mi mandato en los respectivos lugares", continúa en la carta que leyó para los medios su histórico secretario, Georg Gänswein.
Benedicto XVI, Papa emérito, acusado de inacción por pedofilia en Alemania
Joseph Ratizger, que fue arzobispo de Múnich entre 1977 y 1982, añade: "Roguemos públicamente al Dios vivo que perdone nuestras culpas, nuestras grandes y grandísimas culpas".
También admite: "En todos mis encuentros, especialmente durante mis numerosos viajes apostólicos, con víctimas de abusos sexuales por parte de sacerdotes, he mirado a los ojos las consecuencias de una culpa muy grande y he aprendido a comprender que nosotros mismos nos vemos arrastrados a esta gran culpa cuando la descuidamos o cuando no lo afrontamos con la necesaria decisión y responsabilidad, como ha ocurrido y ocurre con demasiada frecuencia".
Benedicto XVI concluye la carta diciendo: "Pronto me enfrentaré al juez definitivo de mi vida. Aunque mirando hacia atrás en mi larga vida puedo tener muchos motivos de temor y miedo, sin embargo, tengo un estado de ánimo alegre porque confío firmemente en que el Señor no sólo es el juez justo, sino también el amigo y hermano que ya ha sufrido él mismo mis carencias y es, por tanto, como juez, al mismo tiempo mi abogado".