Miles de personas ondeaban banderas de distintas organizaciones sociales y lanzaban consignas a favor del primer gobierno de izquierda en la historia de Colombia.
"Que el país pueda ser entonces un país de paz, de justicia ambiental, de justicia social", añadió Petro desde una tarima, fuertemente escoltado.
Las comunidades le entregaron al mandatario un documento con sus principales reclamos: paz en los territorios apartados, defensa del medio ambiente, protección de las minorías, transformación de las políticas de lucha antidrogas, defensa de los derechos humanos, renovación de las fuerzas armadas, entre otros.
"Compartimos nuestro profundo sentimiento de felicidad y responsabilidad por la llegada de este proyecto político nacido en las entrañas de los pueblos y caracterizado por el interés de aportar al cambio", señaló una de las voceras indígenas.
Petro asumirá el poder el domingo en reemplazo del conservador Iván Duque (2018-2022) por un período de cuatro años, sin posibilidad de reelección por orden constitucional.
Su vicepresidenta electa, la ambientalista Francia Márquez, participó en la ceremonia tradicional y recibió de las comunidades las mismas consignas.
"Empieza el gobierno de las nadies y los nadies y vamos de la resistencia al poder hasta que la dignidad se haga costumbre", dijo la afrodescendiente de 40 años.
En un país de 50 millones de habitantes, castigado por la inflación (10.2%) interanual), el desempleo (11.7%) y la pobreza (39%), el gobierno electo propone una batería de reformas para reducir la brecha entre ricos y pobres, proteger el medio ambiente, entre otros objetivos.
"(Voy a) luchar por la justicia social en una de las sociedades más aberrantemente desiguales sobre la Tierra", se comprometió Petro en medio de aplausos.