Edward Snowden, de 39 años, es reclamado por Estados Unidos por haber filtrado a la prensa decenas de miles de documentos que prueban la amplitud de la vigilancia electrónica practicada por Washington.
Sus filtraciones provocaron fuertes tensiones entre Estados Unidos y sus aliados y la decisión de las autoridades rusas de otorgarle un permiso de residencia causó gran enfado en Washington.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, precisó a la agencia RIA Novosti que fue el propio Snowden quien había solicitado la nacionalidad rusa.
El abogado ruso del exconsultor de inteligencia, Anatoli Kucherena, precisó que Snowden no se verá afectado por la orden de movilización para la ofensiva en Ucrania, decretada por el presidente Vladimir Putin la semana pasada para determinadas categorías de la población.
"Él no ha servido en el ejército ruso y, por lo tanto, según nuestra legislación actual, no entra en esta categoría de ciudadanos que están siendo llamados", declaró a la agencia RIA Novosti.
Según Peskov, la pareja de Snowden, Lindsay Mills, también solicitó la nacionalidad rusa y su hija ya la posee, pues nació en Rusia.
Edward Snowden, privado de su pasaporte estadounidense a petición de las autoridades de Washington, llegó a Moscú en 2013 desde Hong Kong, con la idea de encontrar refugio en América Latina. Al final quedó bloqueado en Rusia, donde le dieron asilo.