#EnFotos: Así se vivió la coronación de Carlos III
La coronación es un evento que trata de presentar una monarquía con visión de futuro, en la que los participantes reflejen un país más diverso y todas sus religiones.
Carlos III y su esposa, Camila, fueron coronados este sábado reyes del Reino Unido en la Abadía de Westminster, en el corazón de Londres, en una solemne y emotiva ceremonia que estuvo presidida por el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, primado de la iglesia de Inglaterra.
Se dispararon salvas de artillería en la Torre de Londres y por toda la capital, la nación, Gibraltar, las Bermudas y los barcos en alta mar.
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"Dios salve al Rey Carlos. Larga vida al rey Carlos. Que el rey viva para siempre", dijo la congregación en la abadía tras una fanfarria de trompetas.
Carlos se mostró solemne mientras juraba gobernar con justicia y defender la Iglesia de Inglaterra, de la que es titular. El Arzobispo de Canterbury, Justin Welby, le ungió las manos, la cabeza y el pecho con óleo consagrado en Jerusalén.
En la ceremonia, la congregación gritó "Dios salve al Rey". Sustituyendo el tradicional homenaje de los aristócratas, el religioso invitó entonces a todas las personas, desde donde estuviesen viendo o escuchando la coronación, a jurar lealtad al nuevo rey, una primicia histórica que busca la democratización de la ceremonia, pero que provocó fuertes críticas de los antimonárquicos.
El histórico y solemne servicio, que se remonta a la época de Guillermo el Conquistador en 1066, duró dos horas y fue más sencillo que la coronación de Isabel II.
Tras el servicio religioso, Carlos y Camilla, de 75 años, partieron en el Gold State Coach de cuatro toneladas construido para Jorge III, el último rey de las colonias americanas de Gran Bretaña, para dirigirse al palacio de Buckingham.
Militares de 39 países participaron en el evento de coronación.
En Buckingham Palace, los monarcas aparecieron en el balcón para saludar. Ataviados con sus coronas y trajes ceremoniales, los reyes estuvieron acompañados por el heredero al trono Guillermo y su esposa Catalina.
Uno de los grandes ausentes en el balcón fue Enrique, el hijo menor de Carlos, quien no estuvo invitado por no formar parte de los miembros en funciones.
El lunes, que será feriado, la pareja real llamó a los británicos a realizar tareas de voluntariado.