La atención se ha centrado en las acciones de Ucrania contra las posiciones defensivas de Rusia en el sur y el este, en las etapas iniciales de una contraofensiva que busca hacer retroceder a las tropas del presidente Vladimir Putin del territorio ocupado desde la invasión en febrero de 2022.
Desde el comienzo del conflicto, Ucrania ha pedido, y recibido en gran medida, armas que negó Estados Uniods inicialmente, incluidos lanzadores de misiles HIMARS, baterías de defensa aérea Patriot y tanques Abrams.
¿Cuál ha sido la reacción de Rusia?
Rusia afirmó el sábado que la decisión de Estados Unidos de entregar bombas de racimo a Ucrania es una muestra de "debilidad" que convertirá a Washington en "cómplice" de las muertes de civiles que ese armamento pueda ocasionar.
"El envío de armas de fragmentación es un acto desesperado y una muestra de debilidad en el contexto del fracaso de la tan alardeada contraofensiva ucraniana", afirmó en un comunicado la portavoz de la cancillería rusa, María Zajárova.
La diplomacia rusa denunció un "intento cínico de prolongar la agonía de las actuales autoridades ucranianas sin preocuparse por las víctimas civiles" de estas bombas, que matan a ciegas, esparciendo pequeñas cargas explosivas, antes o después del impacto.
"Al proporcionar municiones de racimo, Washington se convertirá de facto en cómplice del minado y compartirá plenamente la responsabilidad de las muertes causadas por las explosiones, incluidas las de niños rusos y ucranianos”,añadió.
Con información de AFP y Reuters