A un mes de la guerra entre Israel y Hamás, estos son 4 escenarios posibles

“Del lado israelí, lo que pasó el 7 de octubre es el momento más traumático que han vivido desde 1948”, dijo Nizas Shotshan, investigador del Centro de Estudios Sociológicos del Colmex en una sesión del Seminario sobre Violencia y Paz de la institución.

La toma de rehenes y su liberación son temas que causan tensiones políticas y plantean un enorme desafío para el gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

Tras los ataques, Netanyahu prometió "aniquilar" a Hamás y lanzó una ofensiva contra la Franja de Gaza, que es uno de los territorios más densamente poblados del mundo, con 2.4 millones de habitantes.

El Ministerio de Salud de Hamás, que gobierna el territorio desde 2007, asegura que los bombardeos y ataques terrestres de Israel en la Franja de Gaza han provocado la muerte de al menos 10,800 personas.

En este momento, en el que solo se han logrado “pausas humanitarias” de cuatro horas para permitir la salida de civiles de las zonas de mayor conflicto y la entrada de ayuda humanitaria, el conflicto no parece tener un final pronto.

Gilberto Conde, académico del Centro de Estudios de Asia y África del Colmex, explica en que existen varios escenarios que pueden configurarse a partir de este momento para el conflicto, aunque aclara que estos pueden configurarse de distintas maneras y combinarse entre sí. Estos son los cuatro principales.

1. Israel derrota a Hamás

El primer escenario que perfila Conde es que la Fuerzas Armadas de Israel logren su cometido y aniquilen por completo a Hamás, aun si en el proceso terminan con gran parte de la infraestructura de la la Franja de Gaza.

“Para Netanyahu lo ideal sería destruir por completo a Hamas, o por lo menos, si no por completo, de una manera bastante clara”, dijo el especialista en Medio Oriente. “Esa sería una parte de su objetivo. La otra, como él ha dicho, controlar la banda de Gaza por medio de corredores de seguridad que pudiera utilizar libremente el ejército israelí”.

El ministro israelí de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, dijo a a la cadena estadounidense MSNBC el miércoles que el gobierno de su país no tiene intención de ocupar militarmente de nuevo la Franja de Gaza, como lo hizo entre 1967 —después de la Guerra de los seis días— y 2005.

"Estamos totalmente retirados de Gaza desde hace 17 años y nos devolvieron un Estado terrorista. Es obvio que no podemos repetir eso", dijo Dermer, que participa como observador en el gabinete de guerra israelí.

"Cuando Hamás ya no esté en el poder, Israel deberá tener una responsabilidad general de seguridad por un periodo indefinido", explicó en la misma línea de lo expresado en la víspera por el primer ministro Benjamin Netanyahu.

Pero cuando se le preguntó sobre cómo ejercerá esta responsabilidad, Dermer dijo que la cuestión está todavía abierta, pero aseguró que "no se tratará de una ocupación”.

Los representantes de Estados Unidos, el principal aliado de Israel, han indicado que no estarían de acuerdo con una nueva ocupación a largo plazo de este enclave palestino.

"A nuestro parecer los palestinos deben estar al frente de estas decisiones, Gaza es territorio palestino y seguirá siendo territorio palestino", dijo a los periodistas el portavoz del Departamento de Estado, Vedant Patel. ”En términos generales, no apoyamos una reocupación de Gaza y tampoco lo hace Israel", afirmó.

Conde afirma que al largo plazo, este escenario puede ser muy riesgoso para la región, pues no ofrece una solución real al conflicto palestino-israelí y solo le deja el problema a futuros tomadores de decisiones.

“En realidad no es una solución, es un patear el bote, les echa el problema hacia el futuro”, dijo Conde.

Para el especialista, el principal problema es que la situación del sobrevivientes gazatíes va a ser mucho peor que la previa al 7 de octubre —ya calificada por organizaciones de defensa de los derechos humanos como una cárcel al aire libre— lo que puede ser el origen de grupo extremistas mucho más violentos que Hamás.

“Si hay una familia de 30 personas, de las que sobrevive uno, o tres, o cinco, ¿qué van a hacer esos jóvenes dentro de 10 años?”, dijo el profesor del Colmex. “Muchos de ellos se van a resignar, pero mucho de ellos van a tener una rabia contenida que los va llevar a crear un nuevo Hamás, sin la experiencia ni el nivel político de Hamás y que puede ser mucho más violento”.

2. La guerra se extiende por Medio Oriente

Un segundo escenario, también muy peligroso, es que el conflicto se extienda más allá de la Franja de Gaza y que más actores participen de la guerra de manera más activa.

Hasta el momento, la guerra ya ha salido de la Franja de Gaza. Las operaciones en Cisjordania —territorio ocupado, pero gobernado por la Autoridad Palestina— han dejado más muertos desde el 7 de octubre que en los últimos 15 años. Grupos de palestinos se enfrentaron este jueves con tropas israelíes en Yenín, en Cisjordania ocupada, en la incursión más letal del ejército desde 2005.

La ciudad y su campo de refugiados son desde hace tiempo la columna vertebral de la "resistencia" a la ocupación israelí en Cisjordania.

Decenas de explosiones sacudieron el jueves sus calles entre columnas de humo. Vehículos blindados israelíes avanzaban, librando batallas con palestinos armados y lanzando bombas caseras.

Más allá de los territorios palestinos, también Líbano puede ser el siguiente participante en la guerra. Desde el 7 de octubre las milicias de Hezbollah, una milicia militar aliada a Hamás y a Irán, y las Fuerzas Armadas

"Eso configuraría un conflicto completamente distinto, mucho más riesgoso. Esa probabilidad no está totalmente descartada. El dirigente de Hezbollah va a dar una conferencia el día 11 de este mes, o sea, ya en poquísimo tiempo, y no sabemos qué va a salir de ahí”, dijo.

"Si Hezbolá decide unirse a la guerra, cometería el error de su vida", declaró el 4 de noviembre Netanyahu en un discurso, en momentos en que la zona fronteriza entre Israel y Líbano es escenario de cruces diarios de disparos entre el ejército israelí por una parte y Hezbolá y sus aliados por otra desde el inicio de la guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino el 7 de octubre.

“Por otro lado, en Irak y en Siria, las fuerzas, digamos, están aliadas a Hezbollah y a Irán, han atacado a tropas estadounidenses, las tropas estadounidenses han respondido ya el día de hoy con bastante fuerza”, recordó Conde.

3. Hamás resiste el ataque de Israel

Un tercer escenario es que los militantes de Hamás en la Franja de Gaza resistan la incursión de las Fuerzas Armadas de Israel y le causen bajas tan importantes que tanto el gobierno como la sociedad israelís reconsideren sus actividades en el enclave palestino.

Hamás asegura que entre el inicio de la incursión terrestre en Gaza, a finales de octubre, y el 8 de noviembre, han logrado destruir 134 vehículos militares israelíes, incluidos tanques.

“No podemos descartar este escenario, porque aún ahora, el grueso de la sociedad no apoya una incursión terrestre en Gaza por el número de pérdidas humanas que esto puede significar”.

4. Negociación de paz

El último escenario que contempla Conde implica la participación más activa de un actor que no había mencionado: la Autoridad Palestina. El presidente Mahmud Abás ha estado recibiendo visitas de líderes occidentales y de países orientales con el fin de promover un alto al fuego al conflicto.

La semana pasada, de manera sorpresiva, mantuvo una reunión con el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. En esa oportunidad denunció el "genocidio" que, según él, está cometiendo Israel en la Franja de Gaza, "sin tener en cuenta los principios del derecho internacional”.

Otros países árabes que han tenido una participación activa en los esfuerzos diplomáticos para terminar con el conflicto son Egipto y Jordania, vecinos de Israel y que han tenido una participación histórica en el conflicto.

“La Autoridad Palestina está buscando una mediación, ya sea de los países árabes, porque no la puede esperar de Blinken ni de Estados Unidos en su conjunto”, ya que son aliados de Israel, el Estado al que Abás culpa de un “genocidio”, dijo Conde.