Para evitar intimidaciones y hostigamiento, el juez ha decretado el anonimato de los 12 integrantes del jurado y los seis suplentes, que responden simplemente por un número.
El juez ha prohibido a Trump que ataque a los jurados, testigos, personal del tribunal y fiscales, con la excepción de él mismo y del fiscal de Manhattan Alvin Bragg.
Trump considera que dichas prohibiciones son un atentado contra su libertad para hacer campaña, y las califica de injustas porque Cohen no tiene reparos en criticarle.
"Si este lacayo partidista quiere ponerme en la cárcel por decir la VERDAD abierta y obvia, con gusto me convertiré en un Nelson Mandela moderno. Será mi GRAN HONOR", había desafiado Trump.
El juicio oral prosigue este martes con el interrogatorio del primer testigo de la fiscalía David Pecker, expresidente de la empresa editora del tabloide National Enquirer, viejo amigo de Trump y ahora enemigo, que compró, para enterrarlas, historias que podían afectar al magnate durante la campaña electoral de 2016.
Pecker dijo que conoce a Trump desde 1989 y lo describió como un amigo: "Le decía Donald".
También contó que los lectores de National Enquirer "adoraban" a Trump, que protagonizó la exitosa serie de telerrealidad "El Aprendiz" antes de entrar en política en 2015.
"Le seguían religiosamente", dijo Pecker, y una encuesta realizada por el tabloide reveló que "el 80 por ciento" de los lectores votaría por él para presidente. "Le pasé esa información al señor Trump", dijo.