Una "grave violación" de la tregua
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, rechazó inmediatamente estas acusaciones y acusó por su parte a Hezbolá de "grave violación" de la tregua y prometió responder "con contundencia".
Antes de que Israel anunciara que estaba atacando objetivos en Líbano, el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, aliado de Hezbolá, acusó al Estado hebreo de haber violado el acuerdo para un cese el fuego "al menos en 54 ocasiones".
Hezbolá es un movimiento que tiene una milicia, pero que también cuenta con una importante representación en el Legislativo y es un actor preponderante en la política en Líbano.
Berri también hizo un llamado al comité encargado de supervisar la tregua, que integran Estados Unidos y Francia, para "que empiece urgentemente su acción y obligue a Israel a poner fin a sus violaciones y a retirarse" del territorio libanés.
El acuerdo de alto el fuego, impulsado por Estados Unidos y Francia, puso fin a dos meses de guerra abierta entre Israel y Hezbolá.
El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, sostuvo que Estados Unidos considera que el alto el fuego en Líbano continúa en vigencia, pese a los incidentes.
"Cuando recibimos informes de posibles violaciones, contamos con un mecanismo que implementamos con el gobierno de Francia para examinar esas posibles violaciones, determinar si en realidad lo son y luego colaborar con las partes para garantizar que no se repitan", afirmó Miller.
El pacto de cese el fuego prevé la retirada del ejército israelí del Líbano en un plazo de 60 días.
Los soldados israelíes irrumpieron en el sur de Líbano el 30 de septiembre, una semana después de lanzar una campaña de bombardeos masivos contra el movimiento islamista libanés.
El acuerdo también prevé que Hezbolá se retire al norte del río Litani, a unos 30 kilómetros de la frontera, y desmantele su infraestructura militar en el sur del Líbano.
La formación libanesa abrió un "frente de apoyo" al movimiento islamista palestino Hamás después del ataque el 7 de octubre de 2023 contra el sur de Israel, que desató la guerra en Gaza.