La Asamblea Nacional francesa debatirá y votará este miércoles a las 16:00 hora local (9:00 horas, tiempo de Ciudad de México) las mociones de censura presentadas por la izquierda y la extrema derecha contra el gobierno del primer ministro Michel Barnier. Estas mociones responden al polémico procedimiento empleado por el gobierno para aprobar una parte del presupuesto sin someterlo a votación en el Parlamento, donde no tiene mayoría.
Crisis política en Francia: el gobierno de Barnier enfrenta moción de censura
Se espera que la moción de censura del Nuevo Frente Popular (NFP), coalición de izquierda, sea aprobada con el apoyo de Agrupación Nacional (RN), liderada por Marine Le Pen, quien confirmó que su partido votará a favor de cualquier moción. Esto podría significar la caída del gobierno, un hecho inédito desde 1962, y convertiría al gabinete de Barnier en el más breve de la historia de la V República francesa.
La crisis se intensificó tras la decisión del presidente Emmanuel Macron de adelantar las elecciones legislativas previstas para 2027, que dejaron un Parlamento fragmentado y sin mayorías claras. En caso de que el gobierno sea destituido, algunos sectores sugieren que Macron podría verse presionado a dimitir.
El hundimiento del gobierno dejaría un agujero en el corazón de Europa, con Alemania también en proceso electoral, semanas antes de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, vuelva a entrar en la Casa Blanca.
"Si el Gobierno es censurado, eso arrojará a Francia y a los franceses a una situación insufrible", dijo el ministro del Interior, Bruno Retailleau, añadiendo que quienes respaldan la moción de censura están jugando a la "ruleta rusa" con el futuro del país.
El ministro de Presupuesto, Laurent Saint-Martin, afirmó que la caída del gobierno y de sus planes presupuestarios supondría un mayor déficit y más inestabilidad. La prima de riesgo que exigen los inversores por mantener deuda pública francesa en lugar de bunds alemanes rozó el martes su nivel más alto en más de 12 años.
El presupuesto de Barnier, que pretende frenar la espiral de déficit público de Francia mediante 60,000 millones de euros (62,900 millones de dólares) en subidas de impuestos y recortes de gastos, ha encontrado la oposición de políticos tanto de izquierda como de extrema derecha. La izquierda y la extrema derecha juntas tienen votos suficientes para derrocar a Barnier.
La líder de la Reagrupamiento Nacional (RN), Marine Le Pen, confirmó el lunes que su partido votaría a favor de la moción de censura de la coalición de izquierdas, así como de la suya propia. "Los franceses están hartos", dijo.
El gobierno en minoría parlamentaria de Barnier había contado con el apoyo de RN para su supervivencia. Su entorno y el de Le Pen se culparon mutuamente y afirmaron que habían hecho todo lo posible por llegar a un acuerdo y se habían mostrado abiertos al diálogo.
Si la moción de censura prospera, Barnier tendría que presentar su dimisión, pero Macron podría pedirle que se quedara como interino mientras busca un nuevo primer ministro, lo que podría ocurrir el año que viene.
En cualquier caso, no puede haber nuevas elecciones parlamentarias anticipadas antes de julio.
En cuanto al presupuesto, si el Parlamento no lo ha aprobado antes del 20 de diciembre, el gobierno interino podría proponer una legislación especial de emergencia para prorrogar los límites de gasto y las disposiciones fiscales de este año. Pero eso significaría que las medidas de ahorro previstas por Barnier se quedarían sin efecto.