Un papa compasivo
En todo el mundo, fieles recordaron la compasión de Francisco hacia las personas atrapadas en zonas de guerra.
"El papa se preocupó de verdad por nuestro país, el Congo, con las repetidas guerras que estamos sufriendo", dijo Faida Nabintu en una iglesia de la ciudad de Bukavu, en la República Democrática del Congo, en manos de los rebeldes.
En el Santo Sepulcro de Jerusalén, David Sieben, de 25 años, que recientemente completó una peregrinación de nueve meses desde Alemania, explicó que esperaba que el sucesor de Francisco persistiera en su empeño por fomentar el entendimiento entre las diferentes ramas del cristianismo.
"Rezo para que el próximo papa pueda continuar los pasos de nuestro amado Francisco y llevar adelante una unidad entre ortodoxos y católicos", dijo Sieben.
Ho, católico en Seúl, agradeció las oraciones de Francisco por Corea del Sur tras el desastre del ferry Sewol, en el que murieron 304 personas en 2014.
"Cuando el mundo se enfrenta a desafíos complejos, el Papa siempre se preocupa por eso, y siempre siento la más profunda gratitud en mi corazón por él", agregó.
Beata Wolska, pensionista en Polonia, dijo que admiraba la humildad de Francisco y su decisión de ser enterrado en un sencillo ataúd de madera en una basílica de Roma en lugar de en el Vaticano.
"La santidad tiene que ver con la forma en que uno vive, no con lo que uno piensa de sí mismo", dijo Wolska.
Rosane Ribeiro, de Río de Janeiro, describió a Francisco como único y extraordinario.
"Como sacerdote, se levantaba todos los días para rezar por el mundo", señaló. "Era simplemente un 10, y murió en un momento maravilloso y hermoso (Pascua), digno de él”.
Con información de AFP y Reuters