El gobierno de Estados Unidos comenzará este año un proceso de diálogo con sus aliados europeos para analizar la reducción de tropas estadounidenses desplegadas en Europa. Así lo confirmó el viernes el embajador de Washington ante la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Matthew Whitaker, durante una conferencia de seguridad celebrada en Estonia.
Estados Unidos prevé reducir su presencia militar en Europa
(Leah Millis/REUTERS)
Whitaker aclaró que no existe aún una decisión final, pero aseguró que las conversaciones se activarán tras la cumbre de la OTAN programada para junio en La Haya.
“No se ha determinado nada, pero tan pronto como lo hagamos, vamos a tener estas conversaciones en la estructura de la OTAN”, dijo, en declaraciones recogidas por medios internacionales.
El embajador afirmó que los aliados europeos ya se mostraron dispuestos a participar en el diálogo. “Será sin duda después de la cumbre, en algún momento a fines de año, vamos a iniciar esas conversaciones (...). Todos nuestros aliados están dispuestos a hacerlo”, señaló Whitaker ante representantes europeos.
Durante su intervención en Estonia, Whitaker enmarcó la decisión dentro de una vieja demanda de política exterior estadounidense. “Son más de 30 años de deseo de Estados Unidos (de reducir tropas en Europa), el presidente Trump acaba de decir, basta, esto va a suceder y va a suceder ahora, esto va a ser ordenado, pero no vamos a tener más paciencia para arrastrar los pies en esta situación (...) Sólo tenemos que trabajar a través de las consecuencias prácticas”, sostuvo.
A pesar del anuncio, el representante del gobierno estadounidense aseguró que su país no pretende abandonar la OTAN ni desentenderse de la seguridad europea. “Estados Unidos va a permanecer en esta alianza y vamos a ser un gran amigo y un gran aliado”, afirmó.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, reforzó esta posición en una reunión con aliados celebrada en febrero. “Las crudas realidades estratégicas impiden a Estados Unidos centrarse principalmente en la seguridad de Europa”, dijo entonces.
En su discurso en Estonia, Whitaker también criticó las políticas proteccionistas impulsadas desde Bruselas en el sector de defensa. El embajador advirtió que restringir el acceso de empresas no comunitarias a los contratos de defensa en la Unión Europea “socavaría la interoperabilidad de la OTAN, ralentizaría el rearme de Europa, aumentaría los costos y ahogaría la innovación”.
Con información de Reuters.