Una jueza estadounidense bloqueó temporalmente el viernes la orden del gobierno después de que la universidad de Cambridge, Massachusetts, demandó.
La preocupación por la influencia del gobierno chino en Harvard no es nueva. Algunos legisladores estadounidenses, muchos de ellos republicanos, expresan su preocupación por que China esté manipulando Harvard para obtener acceso a tecnología avanzada estadounidense, eludir las leyes de seguridad de Estados Unidos y reprimir las críticas contra ella en Estados Unidos.
"Durante demasiado tiempo, Harvard ha dejado que el Partido Comunista Chino la explote", dijo un funcionario de la Casa Blanca a Reuters el viernes, añadiendo que la escuela había "hecho la vista gorda al acoso dirigido por el PCCh en el campus".
Harvard no respondió inmediatamente a las peticiones de comentarios.
La escuela dijo que la revocación fue un castigo por la "postura percibida" de Harvard, que calificó de violación del derecho a la libertad de expresión garantizado por la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
Los vínculos de Harvard con China, que incluyen asociaciones de investigación y centros académicos centrados en China, tienen larga data. Estos vínculos reportan a la universidad importantes donaciones económicas, influencia en asuntos internacionales y prestigio mundial.
El expresidente de Harvard Larry Summers, que en ocasiones ha sido crítico con la universidad, calificó la medida de la administración Trump de bloquear a los estudiantes extranjeros como el ataque más grave contra la universidad hasta la fecha.