El presidente interino sirio llegó a las 11:37 hora local (16:37 GMT), anunció la Casa Blanca, sin pasar por el portal principal y sin el protocolo habitualmente reservado a los jefes de Estado y de gobierno extranjeros, a quienes Trump casi siempre recibe en persona en el pórtico.
Los periodistas tampoco fueron invitados al Despacho Oval al inicio de la reunión, como suele ocurrir en las visitas oficiales.
Trump dijo la semana pasada que Sharaa estaba haciendo un "muy buen trabajo. Es un vecindario difícil. Y él es un tipo duro. Pero me llevé muy bien con ellos y se ha hecho mucho progreso con Siria".
Siria está gobernada por un Ejecutivo interino desde la caída de Al Asad en diciembre de 2024, después de casi 14 años de guerra civil.
El grupo que dirigía Al Sharaa, Hayat Tahrir al Sham (HTS), anteriormente vinculado a Al Qaida, fue retirado de la lista de organizaciones terroristas de Washington en julio.
El viernes, el gobierno de Trump retiró al líder sirio de la lista negra de terroristas. Desde 2017 y hasta diciembre pasado, el FBI ofrecía una recompensa de 10 millones de dólares por cualquier información que llevara a su captura.
El jueves, el Consejo de Seguridad de la ONU también levantó las sanciones contra Al Sharaa, a iniciativa de Estados Unidos.
Los presidentes estadounidense y sirio también deberían abordar las negociaciones iniciadas por las autoridades sirias con Israel para un acuerdo de seguridad. En virtud de ese acuerdo, Israel se retiraría de las zonas del sur del país ocupadas tras la caída de Al Asad.
Al Sharaa ya se reunió con Trump en Riad durante la gira regional del mandatario estadounidense en mayo.
Entonces Trump había instado a Al Sharaa a unirse a los acuerdos de Abraham, que llevaron a varios países árabes a reconocer a Israel en 2020.