Trump indicó el viernes que su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, tiene hasta el jueves para aprobar el plan, que pide a Ucrania que ceda territorio, acepte límites a su ejército y renuncie a sus ambiciones de unirse a la OTAN.
Para muchos ucranianos, incluidos los soldados que luchan en el frente, estas condiciones equivaldrían a una capitulación tras casi cuatro años de lucha en el conflicto más letal que vive Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Trump dijo el sábado que su propuesta actual para poner fin a la guerra no es su oferta final.
La delegación estadounidense está encabezada por el secretario de Estado Marco Rubio y las principales conversaciones con funcionarios ucranianos arrancaron en Ginebra el domingo por la tarde en un ambiente tenso en la misión de Washington, poco después de que Trump se quejó en su platadorma Truth Social de que Kiev mostró "cero gratitud" a Estados Unidos por sus esfuerzos y que Europa sigue comprando petróleo ruso.
Rubio interrumpió la reunión para hablar con la prensa e indicó que las reuniones fueron probablemente las mejores que Estados Unidos ha mantenido con Ucrania desde que Trump volvió al poder. Agregó que se harán cambios al plan para trabajar hacia una solución con la que tanto Kiev como Washington se sientan cómodos.
"Obviamente, esto tendrá que ser firmado en última instancia por nuestros presidentes, aunque me siento muy cómodo de que eso vaya a ocurrir dado el progreso que hemos hecho", dijo Rubio, que llegó a Ginebra acompañado por el enviado especial de Estados Unidos, Steve Witkoff.
Andriy Yermak, jefe de la delegación ucraniana, se esforzó en agradecer a Trump su compromiso con Kiev durante las breves declaraciones, antes de que él y Rubio volvieran a sus conversaciones. Minutos después, el propio Zelenski dio las gracias a Trump.
Desde que se anunció el plan, ha habido una gran confusión sobre quién participó en su elaboración. Los aliados europeos aseguraron que no fueron consultados.
Cuando los funcionarios comenzaron a reunirse, el canciller alemán Friedrich Merz dijo que el objetivo es elaborar un plan aceptable para Ucrania que pueda utilizarse en una negociación con Rusia.
"Ahora mismo, todavía no estoy convencido de que vayamos a conseguir la solución que quiere el presidente Trump en los próximos días", dijo Merz al margen de una reunión del G20 en Johannesburgo.