Nos matan por no obedecer, por usar falda corta, por mirar o hablar con otro hombre, por decir no. En pocas palabras, nos privan del derecho más básico que es vivir porque nuestra existencia no vale nada, valemos lo que nuestro padre, pareja o el hombre que nos topemos decida qué valemos.
Nos cosifican, invisibilizan, anulan, incomunican, torturan psicológicamente; luego abusan de nosotras, nos violan, lesionan o mutilan aunque estemos vivas o muertas ¿quién lo hace? Puede ser un hombre cercano o un desconocido ¿les parece poco? Pues aunado a esto, exhiben nuestros cuerpos tras ser asesinadas. ¿Lo peor? A quienes luchamos por revertir esto nos llaman “feminazis” ¿es en serio? Para empezar, ese término está utilizado de manera incorrecta, pero pensando en el significado que tiene el sufijo “nazi” ¿no lo serían más bien quienes acaban con nosotras de una manera tan atroz?
No contentos con esto, los medios y las autoridades nos hacen responsables, por habernos quedado ahí, por habernos vestido así, por haber estado ahí. Eso señores, se llama feminicidio, así tal cual lo indica el artículo 325 del Código Penal federal. No, no es lo mismo que maten a un hombre a que maten a una mujer por serlo, se le llama crimen de odio.
Sé que han sido milenios de dominación y violencia hacia la mujer, por eso muchas personas lo tienen normalizado, existía desde antes de que nosotros naciéramos, por eso no lo ven y tampoco lo entienden, pero créanme cuando digo que aunque parezca “natural” no lo es.
Esto no es una lucha campal de hombres contra mujeres, es una búsqueda incansable para que todos podamos vivir mejor. Señores, ¿este despertar les incomoda? Qué pena, pero lo que sí les puedo decir es que ustedes también se van a beneficiar de este cambio. A todos nos conviene que las mujeres seamos libres y que los hombres también lo sean lejos de los paradigmas machistas.
Y si al llegar a este punto estás pensando: estoy siendo estigmatizado porque “yo no violo”, “yo no mato”, “no me dejan ir a marchar las feminazis”, “hagamos un día sin hombres, entonces”; eso no significa que no violentes incluso de manera pasivo agresiva sin darte cuenta a las mujeres de tu entorno ¿por qué? Porque piensas que la mujer “es más frágil por naturaleza”, “es bonita pero tonta”, “inteligente pero fea” “rezongona si quiere cambiar las cosas” y lo eres porque descalificas e invalidas su lucha.