Conectar con los consumidores de manera transparente hará la diferencia entre superar esta situación económica o naufragar. Así que nada de “letras pequeñas” u ofertas que no lo son. Confiaremos en las marcas y en las empresas que entiendan nuestra realidad y repudiaremos a las que busquen quitarnos nuestro dinero.
Mucho gusto compañías, somos nosotros, sus clientes. Empresa que no conozca a sus clientes pasados, presentes o futuros, la pasará mal durante un buen tiempo. Qué desean, buscan o prefieren, son elementos fundamentales para sobrellevar la recesión económica mundial y aprovechar el posible rebote.
Es hora de entablar una conversación real (los robots no cuentan) con aquellos que han confiado en el producto, el servicio y la marca, así como dar a conocer a quienes toman las decisiones para saber si podemos confiar en ellos también.
Lee más
Directivos, directoras (espero que cada vez sean más), responsables de comunicación y mercadotecnia, a partir de ahora todos pueden -y deben- ser voceros. A practicar sus habilidades con la gente y a entrenar su relación con los medios de comunicación y las redes sociales.
Ya que estamos en ello, es importante aclarar que también somos sus empleados; así que cualquier empresa, sin importar su tamaño, que trate injustamente a sus colaboradores o simule que es buen patrón, provocará una reacción negativa directamente proporcional a las violaciones que cometa.