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Un nuevo lenguaje organizacional

Nos hemos convertido en expertos en ciencias exactas, pero no en cómo generar energía, compromiso y bienestar en nuestros equipos, considera Gabriel Figueroa.
lun 08 febrero 2021 11:59 PM

(Expansión) - Hace más de 10 años aprendí una nueva palabra que se utilizaba frecuentemente en la consultora para la que trabajaba en Alemania. Se hablaba de issues, que básicamente se refiere a problemas potenciales.

Siempre se buscaba la gestión de issues para evitar que se conviertan en problemas. Era una forma muy sencilla de evitar sorpresas en un proyecto.

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Algunos coaches ejecutivos de igual manera utilizan distinciones que finalmente son “una nueva manera de nombrar una misma realidad, que invita a adquirir un significado distinto al que había adquirido originalmente con la manera original de nombrar dicha realidad”.

En Talento Humano, en cambio, hay algunos términos que deberíamos instaurar urgentemente y utilizar tan seguido como las palabras compromiso, rotación, fuerza de trabajo, desarrollo, competencias, entre muchas otras.

Nuevas palabras o términos que describen ciertas situaciones nos dan nuevas opciones y alternativas para tomar acción. Veamos tres de ellas relacionadas a Talento Humano:

1. Coherencia organizacional

Las organizaciones están llenas de incoherencias organizacionales, pero rara vez se habla de ellas. La más importante de todas: las incoherencias que se dan entre la visión y el mindset organizacional.

Imagínate una matriz sencilla de 2x2 en la que en el eje vertical se tiene el nivel de visión y en el horizontal el nivel de mindset organizacional, es decir, los hábitos, las rutinas, las creencias y tradiciones de una cultura ganadora y que finalmente traducen la visión en comportamientos y acciones diarias.

Una gran visión sin el mindset organizacional adecuado es una situación de soñadores. Un gran mindset organizacional sin una visión solo son buenas intenciones. Y ni hablar de no tener ni visión ni el mindset organizacional adecuado, eso simplemente sería misión imposible. Pero lo importante es la coherencia que se logra cuando se tienen las dos. Y esto se puede aplicar a nivel corporativo y a nivel personal.

Qué poderoso es poder decir: existe una gran incoherencia entre la política de desarrollo y lo que sucede en mi departamento e ir tras esa incoherencia. Una organización con coherencia organizacional es organización con excelencia organizacional.

2. Productividad evolutiva

Sería extraño hablar de productividad evolutiva durante una reunión, suena un poco extraño. Pero más raro aun es que las personas se llenen de actividades que no generan verdadero valor. Las culturas y las metodologías ágiles están ayudando a mejorar esta situación. Sin embargo, hay mucho por hacer.

Por lo tanto hay que diferenciar entre dos conceptos sumamente conocidos. El primero es administración, que en su forma más sencilla se puede sustituir con “estabilidad”. Una empresa, un equipo o un proyecto bien administrado genera una cierta estabilidad, los recursos están bien enfocados, etc. En cambio, por otro lado, tenemos liderazgo, que, en su forma más sencilla, lo podemos sustituir con “evolución”.

Podemos hablar de productividad evolutiva cuando se ha logrado una evolución en la empresa, en el proyecto, en un proceso o en una persona. Estar ocupado o tener una agenda llena no dice nada. El verdadero progreso está en la evolución.

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3. Ironías organizacionales

Desgraciadamente se dan muy seguido, pero rara vez las sacamos a la superficie para erradicarlas por completo.

Un par de ironías para reflexionar: Logramos ir a la Luna hace más de medio siglo, pero aun así, por lo general no logramos ganarnos el compromiso verdadero de la mayoría de la gente en nuestras empresas. Hablamos de proyectos sostenibles en las empresas, pero muy poco o nada de esfuerzos sostenibles.

Nos hemos convertido en expertos en ciencias exactas, pero no en cómo generar energía, compromiso y bienestar en nuestros equipos. Tenemos grandes visiones, pero no siempre se traducen en hábitos, rutinas o tradiciones organizacionales y/o personales.

Y por supuesto, hay muchísimas ironías diarias en las organizaciones que finalmente corrompen la motivación y el compromiso de la gente.

Los términos en sí pueden ser irrelevantes. Lo importante es llegar a describir una situación real y dañina para lograr atacarla de raíz.

¿Otro término más que creo que se debería de normalizar en nuestro lenguaje? Hablar de seguridad psicológica en los equipos.

En todo caso, necesitamos ser cazadores de ironías e incoherencias organizacionales, y grandes defensores de la coherencia organizacional, así como de la productividad evolutiva.

Nota del editor: Gabriel Figueroa es Socio Director de adbanz – People & Performance | Alumni Accenture Alemania | YPO Speaker | Consultor y Coach Ejecutivo en >15x países & 4x continentes | Experto en Mindset Organizacional, Alto Desempeño y Bienestar. Síguelo en LinkedIn y en https://linktr.ee/Gabrielfigueroa . Las ideas y opiniones expresadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor y no necesariamente representan las ideas y opiniones de adbanz – People & Performance.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

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