¿Sigue siendo México un destino para la inversión? | Expansión Summit 2020
Outsourcing
La aprobación de la prohibición de la subcontratación, publicada el 23 de abril de 2021, y su entrada plena en vigor del próximo 1 de agosto de 2021, como consecuencia de importantes abusos, han cambiado por completo el panorama de los empleadores para las empresas en México.
Si bien la mayoría de las empresas globales operaba legalmente (y presumiblemente pagaba sus impuestos) bajo la ley anterior, la nueva prohibición exigirá que cada empresa distraiga un tiempo significativo, en consulta con sus asesores laborales y fiscales, definiendo y articulando de manera más estricta su “objeto social” para garantizar que todas las funciones auxiliares fuera de ese propósito, se suspendan o se transfieran a proveedores externos de servicios especializados registrados.
Esos proveedores de servicios especializados deben asegurarse que avanzan rápidamente en su propio proceso de registro. Este cambio no se trata solo de cambiar el objeto social; en muchas empresas significa registrar nuevos documentos, deshacerse de ciertas funciones, trasladar a los empleados a nóminas corregidas con impactos en la seguridad social y, en última instancia, no solo para garantizar su propio cumplimiento, sino también para garantizar el de sus proveedores. Existen estimaciones sobre el aumento del costo neto para los empleadores por la implementación de este nuevo marco jurídico de entre un 20% y 25%.
Como puede apreciarse, este cambio va en serio… las empresas globales que operan en el país deben reunir a sus asesores corporativos, laborales y fiscales para sentarse con la gerencia a fin de determinar rápidamente “qué se queda, qué se va” y qué se registra. ¡Los abogados laborales en el país nunca han estado tan ocupados! (Y los tributarios no se quedan atrás).
Si un empleador global está "esperando que cambie la legislación laboral" en México, es poco probable que eso suceda en el corto plazo, incluso con las elecciones de la semana pasada y lo que se puede suponer una cierta ralentización en las próximas leyes.
¿Vale la pena seguir invirtiendo en el mercado laboral mexicano?
¡Sin duda!… Los trabajadores en México son una mano de obra calificada, comprometida y de altos niveles de desempeño; los empleadores que operan a escala mundial de forma rutinaria y regular se hacen esta pregunta en todos los países en los que tienen inversiones, pero los empleadores inteligentes saben que esperar sentados y lamentarse por los desafíos que se enfrentan, no hace que el negocio avance.
Con la atención adecuada a la estrategia corporativa, tributaria y laboral, y el nivel adecuado de compromiso con los asesores legales del empleador global, las empresas pueden seguir navegando por los impactos de estos dos grandes retos de cumplimiento legal. Estas importantes reformas constituyen una oportunidad única para un mercado laboral mexicano “homocéntrico”.
Nota del editor: Jeremy Roth es el más reciente ex presidente de Littler Mendelson, P.C. y Littler Global. Jorge Sales Boyoli es socio de Littler Mexico , SC. Las opiniones publicadas en esta columna pertenecen exclusivamente a los autores.
Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión