Míralo así: si compras un par de tenis Nike, estás adquiriendo un producto diseñado y producido en masa, que es importado a docenas de países, eso lo hace reemplazable porque existen cientos iguales. Pero si compras una obra de Van Gogh estás adquiriendo un objeto no fungible, porque si se pierde o se rompe no hay forma de sustituirlo. Y si algo nos enseñaron las clases de economía de la prepa es que, si existe demanda por una pieza irremplazable, se le puede asignar un alto precio.
¿Y eso qué tiene que ver con los NFT?
Sucede que los NFT funcionan de manera muy similar al arte y poseer el archivo original de un elemento único resulta muy atractivo para varios usuarios, quienes al creer en los NFT creen en sus activos.
Esta es la razón por la que el primer tuit de la historia haya sido valuado como NFT en 2.5 millones de dólares entre los foros de internet. El mensaje es "just setting up my twttr" ("solo estoy configurando mi twttr") y originalmente fue publicado por el ex CEO de Twitter, Jack Dorsey, el 21 de marzo del 2006. El tweet fue adquirido por el empresario Sina Estavi, quien reside en Malasia.
Además de tuits puedes encontrar videos, gifs e imágenes en docenas de páginas web siendo subastados mediante pagos en Ethereum, un tipo de criptomoneda. Una vez adquirido, el archivo es guardado en formato .nft, cuya terminación valida la existencia de la transacción en Blockchain y comprueba que es único en existencia.
No es tan raro como crees…
The Merge es el NFT más vendido hasta ahora. Sus más de 312,000 versiones alternativas han sido adquiridas por 29,000 coleccionistas de todo el mundo, estas versiones varían entre sí por tener una forma o color distintos, por eso para asegurarse de que cada imagen sea única, los distintos elementos que componen la imagen son generados de manera aleatoria para poder obtener la mayor cantidad de variables posibles.
Esto no se ha quedado en internet, las grandes empresas están entrando al juego para promover campañas de marketing y alcanzar nuevas audiencias. Marcas como Asics, Pringles y Coca Cola han lanzado sus propios NFT a manera de coleccionables. El impacto que tiene la inversión de grandes empresas en estos tokens es que respaldan la transacción con criptomonedas.
Los NFT han tenido un impacto en el mundo virtual y real. En México, durante julio del año pasado, Morton, la casa de subastas más importante de México, vendió la obra de arte Viva, del artista mexicano Juan Carlos Valle por 90,000 pesos. Otro de los casos más populares fue el de Adidas, quienes mataron dos pájaros de un tiro y apostaron por una colección de NFT que puedan ser usados como accesorios y avatares dentro de la propuesta de realidad virtual: el metaverso.
