Hoy, solo uno de cada tres empleos en empresas vinculadas con la generación sustentable de energía está ocupado por mujeres, reveló un estudio de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA). Pero hay muchas más que están preparadas para ingresar a este sector. Una encuesta de LinkedIn de 2021 logró medir que hay 62 mujeres por cada 100 hombres que dicen contar con ‘talento verde’.
En un estudio que realizó con la OIT llegaron a la conclusión de que solo en esta área se pueden crear 15 millones de empleos en los siguientes ocho años.
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) realizó el mes pasado un foro con ministros del trabajo y áreas de diversidad de 70 países y se llegó a la conclusión de que la única manera de aprovechar el desarrollo, crecimiento e inversión que desatará en la región este negocio rumbo a 2030 será sumando a las mujeres.
Hay una enorme oportunidad de generar empleos de alto valor agregado en las energías limpias y renovables en Latinoamérica porque es, además, “una región cuya población envejece más rápido que en el resto del mundo y solo podremos responder con prosperidad a este fenómeno si sumamos más mujeres al mercado laboral”, dijo en uno de los paneles principales Caridad Araujo, jefa de División de Género y Diversidad del BID.
Uno de los planes de este organismo multilateral es dar financiamiento para la capacitación de mujeres en habilidades digitales y en capacidades necesarias en empresas de generación y uso de energía renovables para cerrar la enorme brecha laboral de género, que incluso se acentuó en la región a causa de la pandemia. El COVID-19 quitó 13 millones de mujeres de sus empleos, el mayor retroceso en los últimos 30 años.
El BID anunció contar con fondos por 24,000 millones de dólares en los siguientes cuatro años para planes que sumen por un lado la descarbonización y por el otro, la incorporación de mano de obra femenina.
¿Por qué es un sector interesante? Según el FMI, en la actualidad –en una economía global con incertidumbre–, la inversión promedio es de 630,000 mdd anuales en generación de energías limpias, pero debería escalar a entre 3 y 6 billones si es que queremos acompañar con esta descarbonización el crecimiento mundial.
Solo en Latinoamérica, la demanda de energía primaria y electricidad crecerá entre 25 y 40% para 2040, calcula el BID.