Reseña: Moto G7 Plus el reto de no vender gimmicks

CIUDAD DE MÉXICO (Expansión) - Cuando sale una nueva tecnología al mercado, invariablemente siempre suceden tres cosas: uno, tiende a llamar la atención por su novedad y atracción de uso o forma visual. Dos, es altamente costosa e incluso hasta inalcanzable para 97% de la población, y tres, marca una brecha entre quienes la tienen y pueden utilizar y aquellos que deben estar relegados a utilizar versiones anteriores menos innovadoras pero más accesibles.

Así ha pasado con los primeros televisores en HD, 2K, 4K, hasta llegar a la nueva era de 8K. Las pantallas LCD, Plasma, LED, OLED y ahora los paneles flexibles. E incluso ha pasado con servicios como el internet, banda ancha, fibra óptica y pasará con 5G. Así, no sorprende que en el mercado de teléfonos inteligentes la brecha estuviera marcada por aquellos usuarios que tenían la capacidad de adquirir un equipo de gama alta como iPhone o Galaxy con los mejores procesadores, las mejores pantallas, las mejores cámaras y las tecnologías más avanzadas como seguridad biométrica o sistemas de inteligencia artificial.

Por lo mismo se trataban de los teléfonos más costosos del mercado, el resto de los usuarios debían conformarse a equipos con malos desempeños, software limitado, pésimas cámaras y diseños y materiales feos.

Pero en los últimos dos años, el mercado de telefonía ha vivido una transformación cada vez más notoria, una que ya pone una enorme presión para firmas como Apple, Samsung y Huawei: la madurez de las tecnologías móviles.

Hoy las pantallas de alta definición de borde a borde, sistemas de seguridad por huella digital o reconocimiento facial, así como procesadores avanzados, cámaras duales o con inteligencia artificial ya no son tecnologías exclusivas a los modelos que rebasan los 20,000 pesos.

Su desarrollo ha madurado al grado de que su costo, funcionamiento y uso se han convertido en un bien básico y no una funcionalidad exclusiva.

El claro ejemplo es la más reciente familia de dispositivos Moto G7. Equipos de rango medio que se venden entre lo 4,500 y 7,500 pesos en México. Aunque existen diferencias entre los modelos, la promesa de Motorola con estos equipos es entregar al consumidor un smartphone que funcionará perfectamente para el 80% de todos los usuarios móviles.

Expansión probó el Moto G7 Plus para comprobar la verdad detrás de esa promesa.

Diseño e interiores

Aunque la versión de entrada del Moto G7 (Power) tiene acabados en plástico, el G7 Plus y G7 tienen un terminado en cuerpo de cristal Gorilla Glass por ambos lados. El color rojo que probamos no solo es llamativo a la vista, sino muestra el interés que Motorola ha puesto en el diseño del equipo.

No se trata de una revolución en el diseño y acabados, pero se mantiene en línea en cuanto a calidad visual, materiales y detalles de equipos como iPhone Xs, Xr o modelos como el Galaxy S9 o Mate 20.

Un digno contendiente de esos equipos que con gusto colocarás sobre la mesa mientras trabajas.

Pantalla

Se trata de un panel Full HD LCD de 6.2 pulgadas con una densidad de píxeles de 405 ppi. En esencia la resolución de la pantalla es incluso mejor a la del iPhone Xr. Con un diseño de borde a borde una pestaña o notch como se le conoce en forma de gota.

La pantalla maneja un buen tono de colores y contraste, y gracias a que es un equipo con la certificación Dolby Audio, la reproducción de contenidos con o sin audífonos es bastante placentera. Sin embargo, está lejos de alcanzar los niveles de una pantalla OLED como las que se encuentran en modelos como el Mate 20 Pro, Note 9 o iPhone XS.

Y pese a que pareciera tener mejor resolución que equipos como el iPhoneXr, existen ciertos detalles visibles en cuanto a la velocidad a la que se refresca la pantalla o incluso luminosidad. De cualquier forma, no se tratan de detalles que impidan tener una experiencia en Netflix, Amazon Video o YouTube o cualquier otro contenido multimedia que sea placentera, de calidad y satisfactoria.

Cámara

Sin duda la mejor sorpresa de todo el Moto G7 es la cámara. El equipo tiene una cámara trasera dual, un lente gran angular de 16MP y un sensor adicional de profundidad de 5MP. Su cámara frontal es un lente de 12MP. Por generaciones Motorola siempre ha tenido un problema en cuanto a la forma en la que maneja las imágenes, controlaba barridos o ambientes con poca luz. No era un tema de resolución era un tema de cómo el teléfono manejaba el proceso de captura como un todo. Con el Moto G7 Plus, Motorola por fin entrega una cámara no sólo cumplidora, sino bastante sobre saliente.

Ahora que quede claro, de ninguna manera las fotos que captura el Moto G7 plus están cercanas a competir contra las de un Pixel 3, iPhone Xs, Mate 20 Pro o Note 9. Las cámaras todavía tienen problemas en capturas con baja iluminación, detalles con algunos barridos en fotos con movimiento y su modo retrato, incluso con las dos cámaras tiende a ser más deficiente en el recorte de rostros u objetos, algo que equipos con un solo lente, como el iPhone XR o Pixel 3, hacen mejor.

Pero pese a ello las fotos cumplirán con las expectativas diarias de todos los usuarios, por momentos incluso ofrecerán imágenes muchos más fidedignas a las del Mate 20, P20 o Galaxy Note 9 o S9 que tienden a sobre exagerar colores, en especial cuando se tiene actividades las funciones de fotos con inteligencia artificial.

En ese sentido la cámara del Moto G7 Plus se parece un poco más a la del iPhone, al ofrecer imágenes con tonos menos saturados, pero colores mucho más realistas o cercanos a la realidad.

En cuanto a capacidad de video el equipo es capaz de grabar videos en resolución 4K hasta 30 cuadros por segundo, aunque el video no tiene problemas, sus micrófonos no son tan sensibles al sonido ambiental como los de otros equipos por lo que el audio puede representar una limitante a la hora de grabar algunos contenidos.

Desempeño y batería

En interiores el equipo tiene un procesador Snapdragon 636, 4GB en RAM y 64GB de memoria interna con posibilidad de expandirse vía tarjeta microSD. ¿Qué significa todo esto? Que el móvil tiene la suficiente capacidad gráfica y de procesamiento para correr sin contratiempos las apps y servicios que el 100% de todos los usuarios podrían necesitar: redes sociales, navegación web, apps de movilidad, servicios bancarios o de comercio electrónico, email y apps de mensajería e incluso la mayoría de juegos de video.

En cuanto a su batería integra una batería de 3,000 miliamperios y aunque el número en sí no significa nada, la mezcla entre hardware y software hacen que el equipo ofrezca una rendimiento en uso intenso de al menos un día.

Conclusión

Es el Moto G7 Plus el mejor teléfono del mercado. Por supuesto que no, para muchos usuarios la falta de funcionalidades como la resistencia al agua, la carga inalámbrica, una cámara digital de alto rendimiento, pantallas OLED o la capacidad de tener un procesador que aguante juegos de alta demanda como Fortnite serán factores de compra que los alejarán del equipo. Sin embargo, para muchos otros usuarios que piensan cada peso de su inversión en un teléfono inteligente, que quizá no desean lo último en tecnología, sino un equipo que les resuelva su vida digital sin complicaciones, sin errores de software, con una cámara más que decente, una buena pantalla y un diseño y acabados que no lo hagan parecer o sentirse como una caja de chicles de piñata, smartphones como el Moto G7 Plus pueden ser la solución ideal.

Una solución que luce cada vez más común en el mercado de gama media y que reta a compañías como Apple, Samsung o Huawei y a sus modelos más costosos a encontrar la manera de innovar, crear o de plano justificar por qué esas funcionalidades o mejoras faltantes en el Moto G7 valen por sí solas otros 20,000 pesos de inversión del bolsillo del consumidor. Si nos vamos por lo que dice la tendencia en el mercado global, pareciera ser que muchos consumidores no están encontrando suficientes razones para justificar el gasto.