Si vives en China casi todo lo que quieras hacer en tu día a día lo puedes hacer a través de la pantalla de tu smartphone. Comprar el súper, pagar tus servicios, comunicarte, pedir un transporte, ver un concierto, ir al cine o jugar algo casual, y todo esto lo puedes hacer desde la misma aplicación, o dos a lo mucho. En contraste, si vives en América Latina, lo más probable es que tengas al menos 20 apps diferentes en tu celular, de acuerdo a eMarketer; sin embargo, algunas firmas como Rappi buscan cambiar esto convirtiéndose en “súper apps”.
Si bien Rappi llegó al mercado en 2015, con una oferta limitada a delivery de comida o productos de supermercados, ha sumado otro tipo de servicios en los últimos años. Actualmente es posible pedirle a un repartidor de Rappi que te lleve algo que olvidaste hasta donde estás, que pasee a tu perro o que compre ropa y pague servicios por ti, y a partir de ayer, ahora también podrás ver conciertos en vivo, escuchar música en streaming y jugar videojuegos.
La similitud de la oferta de Rappi a lo que hoy ofrecen las llamadas “súper apps” asiáticas como We Chat, Ali Pay, Line, Grab o Go-Jek de Indonesia es casi una calca, y es cierto, el unicornio colombiano busca replicar este modelo en América Latina apoyado en una oferta de servicios de entretenimiento y transacciones, sin dejar la misma pantalla.