Pese a que actualmente hay tensiones comerciales entre ambos países existe una balanza comercial entre ambos en la que un gran interés es derivado de la tecnología. Hasta el cierre de 2019, la inversión extranjera directa (IED) de China en Estados Unidos fue de 5,000 millones de dólares, y aunque tuvo su pico en 2016, con un intercambio de 18,700 millones de dólares, de acuerdo con Rhodium Group.
Sin embargo, al ver la relación al revés, el apetito tecnológico es mayor. Rhodium Group publicó que en 2019 las firmas de Estados Unidos invirtieron 14,000 millones de dólares en empresas chinas, con un especial foco en tecnología.
“En los últimos cinco años, los inversionistas americanos han puesto la mira en compañías chinas de alta tecnología y servicios. Aunque en 2019 vimos movimientos por las tensiones entre los dos países y un reacomodo del interés a la industria de autos, salud y biotecnología”, citó el reporte de Rhodium.
Algunas inversiones históricas y hechas recientemente por firmas estadounidenses en China van desde laboratorios de Microsoft hasta la oficina más nueva de TikTok en Austin, Texas.