Transparent Business, un unicornio rosa que capitaliza el home office femenino

“Muchas mujeres no podían conectarse a su trabajo, por lo que buscamos una solución pensando en ellas. En tiempos de crisis hace falta mucha inclusión, hace falta empatía, liderazgo y que se quiebren modelos tradicionales. Por ello es que la solución llamó la atención de los inversionistas”, precisó Moschini.

Lo que ofrece Transparent Business es una solución para gestionar el talento de forma remota; ofrece un modelo en el que sin importar dónde esté la persona puede tener acceso a su trabajo, lo cual en medio de la pandemia aportó a la tendencia del home office.

El aprovechamiento de esta oportunidad de negocio durante la pandemia fue lo que hizo que Transparent Business creciera exponencialmente en solo unos meses. Pese a estar activa desde 2012 la startup creció hasta 1100% de un mes a otro, lo que les hizo acelerar sus procesos.

“Las empresas buscaron trabajar sí o sí de forma remota en el aislamiento, nuestra primera fase fue asegurarnos que los colaboradores contarán con un equipo para trabajar, posterior a esto proporcionamos soluciones de colaboración como Teams y Meet y después de esto proporcionamos un sistema de gestión”, dijo Moschini.

En México, la plataforma logró hacer alianza con la Concamin, Cisco, Facebook, Citrix y Google con quienes llevaron a cabo un programa gratuito llamado Cloud Working Academy, que se enfocó en ayudar a empresas en esta transición de trabajo remoto. En cuanto a la distribución de la solución del país, las empresas que distribuyen Transparent Business son Telcel y Kio NetWorks.

Poder femenino

La startup complementaria al proyecto de Moschini dentro de Transparent Business es SheWorks, una plataforma que capacita y conecta a mujeres en oportunidades laborales flexibles y globales de manera remota. La idea es que quienes estén interesadas puedan formar parte de empresas que estén en México o fuera del país, pues la idea es conectar oferta y demanda de este sector para trabajar a distancia.

“Los modelos flexibles funcionan muy bien para las mujeres y hombres, pero en específico para colaboradoras les permite tener un equilibrio entre vida personal y profesional, que en especial en México puede ser complicado conseguir”, refirió Moschini.

Este proyecto, además de acercar oportunidades laborales busca acortar la brecha de representatividad de talento femenino en el mundo corporativo.

De acuerdo con el Centro de Investigaciones y Estudios de Género de la UNAM, antes de la pandemia por COVID-19, la representación laboral femenina tenía una participación del 45.9%; sin embargo, se redujo a 36.4% de enero a abril de 2020.

Salir al mercado sin inversionistas

Tras el crecimiento exponencial de este nuevo unicornio latino Moschini decidió aplicar una nueva forma de captar inversión para poder seguir creciendo y dejó de lado la típica Oferta Pública Inicial (OPI) y a los fondos de capital, por un modelo de inversión colaborativa.

De acuerdo con la empresa, la valoración estimada que tienen hacia el cuarto trimestre de 2021 es de 10,000 millones de dólares y se trató de un levantamiento de capital privado, no a través de venture capitals.

“Fuimos a la gente directamente e hicimos las cosas diferente, por ello hicimos una oferta global privada, algo así como una Oferta Pública Inicial (OPI), pero privada. Esta convocatoria la lanzamos a nivel mundial y la idea fue que los interesados hicieran una inversión desde 6,000 dólares, hasta el momento tenemos más de 1,000 inversionistas en el mundo y muchos de ellos son personas comunes”, precisó Moschini.

La idea de la empresa es democratizar también el acceso a ser inversionista, sin tener que ser un fondo de capital.