La propagación del virus del COVID-19 retó al mundo e impactó a las naciones, tanto económica como socialmente e hizo que en aras de mantener en resguardo a sus empleados, la mayor parte de las empresas optaron por mandar a sus colaboradores a trabajar 100% desde casa digitalmente, y eso ayudó a contener la expansión física del COVID-19, pero abrió la puerta a la ciberpandemia.
En un ambiente de trabajo hiperconectado, para el que ni empresas, ni usuarios estaban del todo listos, Gil Schwed, CEO de la firma de ciberseguridad Checkpoint, advierte que se enfrenta una “ciberpandemia”, pues los ciberdelincuentes aprovechan los huecos de seguridad del home office para vulnerar los sistemas empresariales, por lo que ahora es apremiante que las compañías sean más proactivas y vigilantes de las redes por las que pasan sus datos.