Uber reportó pérdidas netas por 1,100 millones de dólares en el tercer trimestre de 2020, en comparación con el mismo periodo del año pasado; sin embargo, ésta no es la única cifra que refleja el impacto que ha tenido el distanciamiento social y menor flujo de movilidad en las ciudades en las que opera la empresa, pues a partir de la pandemia de COVID-19 los indicadores del negocio de Uber han ido a la baja, mientras que su negocio de delivery, Uber Eats, ha sido la única división que ha conseguido mantenerse en crecimiento.
“A medida que regrese el crecimiento regresaremos a una tendencia de rentabilidad”, citó Nelson Chai, director financiero de Uber, durante su reporte de resultados trimestral.