Google había dicho que estaba comprando Fitbit, que fabrica un dispositivo similar a un reloj para medir la actividad física, como una forma de ingresar al mercado de dispositivos y esperaba abordar las preocupaciones sobre privacidad.
"Trabajamos con los reguladores globales en un enfoque que protege las expectativas de privacidad de los consumidores", dijo Google en una publicación de blog, que decía que Fitbit tenía 29 millones de usuarios activos.
"(Eso incluye) una serie de compromisos vinculantes que confirman que los datos de salud y bienestar de los usuarios de Fitbit no se utilizarán para anuncios de Google y estos datos se separarán de otros datos de anuncios de Google".
Si bien Alphabet es más conocido por un servicio gratuito, su motor de búsqueda Google, tiene muchas otras empresas, incluidos servicios de publicidad en línea, el fabricante de dispositivos de audio y termostatos Nest, la compañía de videos YouTube y la firma de automóviles autónomos Waymo.
Google ganó la aprobación antimonopolio de la UE el mes pasado para su oferta por Fitbit tras aceptar restricciones sobre cómo utilizará los datos relacionados con la salud de los clientes.
El plan de Google para comprar Fitbit generó preocupaciones cuando se anunció a fines de 2019 debido a su ya rico banco de datos sobre las personas, lo que compran, a dónde viajan y más.
Los rastreadores de actividad física de Fitbit y otros dispositivos monitorizan los pasos diarios de los usuarios, las calorías quemadas y la distancia recorrida. También miden pisos subidos, frecuencia cardíaca y cuánto tiempo y qué tan bien duermen las personas.
