“Creo que esto es una prueba de cómo un mito que existía desde hace tiempo, donde decían que las criptomonedas eran como un casino, que entrabas y casi apostabas, se disuelve… es gracioso ver como cripto se ve ahora como activo institucional y Wall Street se vuelve un casino, es interesante ver cómo cambian las dinámicas”, dijo a Expansión, Abraham Cobos, analista de criptodivisas en Bitso.
Las criptomonedas desde su surgimiento han buscado democratizar la economía y han buscado brindar certeza al valor de sus monedas a través de redes, lo que ha generado que criptodivisas como Bitcoin hoy tengan la confianza de inversionistas, aseguradoras y empresas, en todo el mundo.
“Desde el punto de vista de analistas hay criptodivisas que tienen un objetivo para validar el trading, y que se comportan de la misma forma que otros activos de la bolsa usual, entonces en las criptomonedas es muy difícil que pase lo que ahora está pasando en Wall Street”, dijo Cobos.
La subida de GameStop obligó a la Bolsa de Nueva York a paralizar su cotización -una herramienta para hacer frente a la volatilidad- nueve veces el lunes y cinco el martes. Este tipo de movimientos ya generó preocupaciones entre los analistas por posibles burbujas en acciones que los fondos de cobertura y otros actores especulativos habían apostado a que su valor bajaría.
Este suceso también ha despertado el debate sobre si el mercado de valores está sobrevalorado y desconectado de lo que sucede en realidad. Game Stop, que se ha visto afectada por la pandemia de COVID-19 y por el aumento de las compras de videojuegos en línea, era conocida entre los expertos del mercado por su potencial bajista y muchos habían comprado opciones de venta, una apuesta que se ha visto "aplastada" con las recientes subidas.
Esto ha provocado que fondos de inversión como Melvin Capital, uno de los fondos más famosos en la bolsa, saliera anticipadamente del plazo de short-selling que tenía con la bolsa, pues si se quedaban podían entrar en bancarrota. Y en cambio varios de los inversionistas que apostaron por comprar acciones de GameStop han logrado ganancias en unas pocas horas.
Esta acción ha provocado que varios fondos empiecen a buscar ‘regular’ este tipo de compras, algo que de acuerdo a Cobos, puede hacer enojar al usuario normal que quiera comprar acciones.
“Decirles a las personas en EU que no pueden comprar acciones nada más por que sí, no es viable, pues muchos dirían que les están limitando su libertad financiera de comprar una acción, si el gobierno logra prohibir eso pone una línea difícil entre lo que puede hacer gobierno y las libertades que proporciona en teoría el mercado”, preciso Cobos.