Twitter sufre los efectos de tener a Elon Musk al frente. El jueves por la noche, cientos de empleados renunciaron a la empresa después de recibir un correo electrónico por parte del empresario, quien les dio un ultimátum respecto a que debían comprometerse con la nueva cultura de trabajo “duro” que el empresario llamó “Twitter 2.0”.
De acuerdo con mensajes del Slack interno de la empresa, obtenidos por varios medios de comunicación en Estados Unidos, Musk dio como límite las 17:00 horas del jueves 17 de noviembre para que los empleados respondieran “Sí” en un formulario de Google si querían quedarse en la empresa; de lo contrario, sería su último día en la compañía y recibirían una indemnización.
“En el futuro, para construir un Twitter 2.0 rompedor y tener éxito en un mundo cada vez más competitivo, tendremos que ser extremadamente duros. Esto significará trabajar muchas horas a gran intensidad. Sólo un rendimiento excepcional construirá una calificación aprobatoria”, escribió Musk en su mensaje, el cual fue revelado por The Washington Post.