El Reino Unido busca establecer una nueva ley de seguridad en línea dentro de su territorio, pero las condiciones que está exigiendo son desproporcionadas para la industria tecnológica. O al menos eso es lo que piensan los ejecutivos de WhatsApp, quienes pusieron en duda la continuidad de su servicio en ese país si son obligados a cumplir la legislación.
El proyecto de ley de seguridad en línea busca que el Reino Unido sea “el lugar más seguro del mundo para conectarse”. Esto significa una mayor presión sobre empresas como Meta, Google o Twitter, entre otras, para controlar el comportamiento de los usuarios y eliminar el contenido dañino.
Para el caso de WhatsApp, uno de sus principales efectos es que la aplicación debería permitir el escaneo de los mensajes en busca de material de abuso sexual infantil. Si bien las autoridades del Reino Unido no han dicho cómo implementarán la medida, los investigadores de seguridad de la app dicen que es imposible hacerlo sin romper el cifrado de extremo a extremo, aunque los partidarios de la ley lo niegan.