La integración de la IA en los electrodomésticos responde a factores clave en la industria, principalmente relacionados con la conveniencia, eficiencia energética y la personalización de la experiencia del usuario.
Philipp Sachs, director de operaciones de XeelTech -una empresa de electrodomésticos y aplicaciones de software-, señaló que usar este tipo de tecnologías “pueden optimizar el uso de recursos como agua, electricidad y detergente”.
Por ejemplo, los refrigeradores con IA pueden ajustar automáticamente la temperatura según los alimentos almacenados, mientras que las lavadoras ajustan los ciclos de lavado en función de la suciedad y la cantidad de ropa, lo que puede ahorrar hasta un 70% de energía, de acuerdo con datos de Samsung.
Ahora que la empresa surcoreana presentó su nueva versión de BeSpoke Laundry, Mauricio Aymes, director de Digital Appliances en Samsung Electronics México, señaló que uno de los retos que tendrían en el mercado mexicano era el cuestionamiento que plantea esta nueva lavadora para las personas que acostumbran lavar con mucho jabón.
El lavado inteligente AI Wash permite que los usuarios sólo tengan que meter la ropa a lavar y presionar el botón de iniciar. Tras un análisis, el aparato define el tipo de tela, peso de la ropa, grado de suciedad y número de prendas que se colocaron y calcula la cantidad de agua y detergente que se utilizará.
“En promedio, los usuarios usan aproximadamente 100 mililitros de detergente en cada carga, lo que es bastante, por ello es que este equipo cuenta con un dispensador automático que proporciona más o menos entre 25 y 50 mililitros”, apuntó Aymes.
Otra de las funciones que destacan los impulsores de este tipo de tecnologías es que estos gadgets aprenden de los hábitos de los usuarios y personalizan sus funciones. Por ejemplo, los hornos inteligentes pueden reconocer los alimentos que se están cocinando y recomendar ajustes de cocción apropiados. Estos avances simplifican tareas cotidianas y ofrecen un mayor control sobre el entorno del hogar.
A pesar de los beneficios, algunos analistas y usuarios han expresado preocupaciones sobre la privacidad, ya que estos electrodomésticos recopilan y procesan datos constantemente. Además, el costo de los electrodomésticos habilitados con IA sigue siendo elevado, lo que los hace menos accesibles para muchos consumidores.
Monitoreo en tu comida
Muchos dispositivos, como refrigeradores o asistentes de voz con IA, están equipados con micrófonos y cámaras para entender comandos o detectar objetos. Esto plantea riesgos potenciales si los datos se almacenan o se comparten con terceros sin el consentimiento adecuado.
Además, los dispositivos con IA siempre activos (always-on), como los sistemas de climatización o las cerraduras inteligentes, monitorizan continuamente las acciones de los usuarios. Aunque la intención es facilitar la automatización, algunos usuarios temen que estos dispositivos puedan registrar conversaciones o información sensible, creando un posible problema de vigilancia.
Sin embargo, el entusiasmo por integrar este tipo de dispositivos crece y las marcas apuestan por tener ecosistemas completos conectados, como es el caso de Smart Things de Samsung, o incluso algunas aplicaciones de Xiaomi, donde se integran electrodomésticos a los smartphones.