México, generador de tecnología
El directivo resalta el hecho de que prácticamente toda la producción de los dispositivos de Margules sucede en México, tanto con proveedores locales de materiales como con talento nacional. “México no está visto como un país tecnológico a nivel internacional”, lamenta.
No obstante, el objetivo de la compañía es cambiar esa idea tanto a nivel local como en el extranjero. Parte de ello se ha logrado a través de los procesos de manufactura, pues los gabinetes, los chasis de los dispositivos, las cajas acústicas, las bobinas y más componentes son hechos en el país, a excepción de las tarjetas de circuito impreso, cuyo diseño corre a cargo de los ingenieros de la empresa, pero se envían a fabricar con proveedores chinos.
“La exigencia que hemos tenido con nuestros proveedores es uno de los temas importantes”, afirma Margules. “La calidad de nuestros procesos ha ido mejorando y hacemos que sea repetible y los componentes que mandamos a hacer con proveedores a nivel internacional también deben cumplir nuestras exigencias, nuestros estándares”.
La empresa tiene presencia a nivel internacional e incluso aspectos como el empaquetamiento de los dispositivos es completamente original y cuidado a detalle para llegar hasta Australia, Corea, Japón, España, Francia, Canadá, Estados Unidos, Perú y Chile.
De acuerdo con Julián Margules, el objetivo es crecer tanto en el ámbito local como en el internacional, principalmente a través de experiencias en espacios públicos, como restaurantes de lujo y proyectos de ambientación sonora.
“Comercialmente es importante la parte estética, pero también es fundamental que el sonido sea agradable”, señala respecto a la exploración de nuevos mercados más allá de los dispositivos para los hogares de los melómanos.
En el Gran Museo Maya, en Mérida, la empresa desarrolló un proyecto sonoro y de video para el paseo y la explanada del lugar, el cual tiene una superficie de 10,000 metros cuadrados. Asimismo, generó una estrategia de ambientación para el restaurante Elly’s, mismo que se complementa con una selección de discos en vinilo que se reproducen en tornamesas de Margules.
Por ello, el directivo recalca que los competidores reales de Margules no están en México. Al tratarse de una empresa que apunta a costos muy elevados, empresas como Sony, Bosé o incluso Sonos se mantienen en una categoría por debajo. Más bien, la compañía ve de frente a sus rivales en en show internacionales donde sólo acuden entre 80 y 100 marcas.
Hace un mes, Kenichiro Hibi, director general de Sony México y Latinoamérica, explicó a Expansión que el audio es uno de los segmentos con mayor potencial en la región por las características de la población. “Los latinos no pueden vivir sin música. Nuestro negocio de audio es muy grande en la región”, dijo en relación a audífonos y bocinas.
Margules destaca que si bien hay marcas masivas que aspiran al audio de alto desempeño, el factor diferencial de esta compañía mexicana es la apuesta por procesos de fabricación que son considerados artesanías, pues de un dispositivo suelen producir entre 20 a dispositivos en un año .
“Es como un taller de relojería suizo”, compartió Jacobo Margules, parte de la dinastía Margules. “Hacemos pocos elementos al año, pero los clientes mismos te van trayendo a otros clientes. El hacer bien las cosas va dando paso a darse a conocer. Nuestro sector no es solo el del audiófilo, es de la gente que le gusta lo bueno”.
