Para muchas organizaciones, adoptar un sistema que cambia constantemente implica modificar procesos internos, políticas de TI y hábitos de trabajo e inversión, y eso es lo que genera resistencia.
Si bien Hermida reconoce que es necesario reestructurar procesos e invertir capital, en la práctica ésto es retribuido a las empresas que migran. La especialista explica que el modelo de cloud incluso permite a quienes lo implementan experimenten un costo significativamente menor pues puede activar, por ejemplo, un entorno virtual temporal para hacer pruebas con datos reales del negocio sin afectar los sistemas en producción.
Un estudio de IDC patrocinado por Google encontró un retorno de inversión de 318% en cinco años para empresas que migraron a Google Cloud LaaS. Así como una reducción de 51% en costos operativos de Ti a lo largo de este tiempo.
Pero incluso conociendo los beneficios, algunos directivos, dice Hermida, se resisten al cambio pues imaginan “mega proyectos” de digitalización con procesos automatizados de punta a punta. Para ella, la clave está en pequeños casos de uso como primer paso.
Un proyecto monumental sería querer digitalizar toda la cadena de suministro simultáneamente. Un pequeño caso de uno sería aplicar IA para predecir fallas en un solo equipo o automatizar el registro de inventario. De esta forma las compañías pueden obtener casos de alto impacto pero bajo riesgo que les permiten medir resultados y escalar con base en evidencia, no en planes teóricos.
Hermida subraya que la nube es el puente natural hacia la IA, el machine learning, IoT y automatización avanzada. Para iniciar propone que cada empresa evalúe el impacto real de migración: qué procesos mejorarían, qué costos se reducirían y qué riesgos se eliminarían.
Por otro lado, Isol identifica tres pasos clave:
Evaluación de infraestructura existente.Entender aplicaciones, dependencias, flujos de datos y objetivos concretos.
Elección del modelo adecuado.Híbrido, multi-cloud o full cloud según madurez interna y requisitos regulatorios.
Selección estratégica del proveedor.Decidir entre AWS, Azure o Google Cloud define desde gobernanza hasta metodología de migración (rehosting, refactoring o modernización).
“Cloud es un habilitador que te permite equivocarte más barato, aprender más rápido y tener una propuesta de valor más ágil (...) La única forma de afrontar lo desconocido es aprendiendo, entendiendo, manipulando”, concluye Hermida.